Joao Maleck, futbolista mexicano de ascendencia camerunesa, ha sido sentenciado por homicidio agravado.
No es el primero caso de un jugador que milita en el futbol nacional, que pisa la cárcel.
EL GATO ORTIZ
Omar Ortiz, portero que defendió las casacas de Monterrey, Chiapas y Celaya, fue apresado en el 2012 como parte de la banda de secuestradores. Fue sentenciado a 75 años de cárcel.
AURELIO RIVERA
Fiero defensa, terror de los delanteros, Aurelio Rivera estaba en la etapa final de su carrera cuando fue sentenciado a seis años de cárcel debido a el homicidio de dos ciclistas mientras manejaba en estado de ebriedad en 1996. Salió a tes del tiempo previsto por buena conducta.
ALEJANDRO MOLINA
En el 2015, Alejandro Molina, entonces futbolista del Necaxa, salió de fiesta con su compañero de equipo el uruguayo Luis Gorocito, fiesta que terminó mal ya que acabaron golpeando a un joven que murió días después debido a las lesiones. Ambos futbolistas pasaron cuatro y cinco años en prisión respectivamente, cuando la fiscalía pedía una pena de 40. Pagaron cada uno una cuenta de cerca del millón de dólares.
GONZALO FARFÁN
Exfutbolista de Atlante y América, Gonzalo Farfán hacia sus pininos en la dirección técnica tomando el mando interino del América. Después de un triunfo salió de manejar alcoholizado y atropelló a dos empleados de limpieza . Pasó unos días en prisión para ser liberado en base a una fianza.
RAMÓN RAMÍREZ
Al tratar de regresar a una concentración con los Tigres, Ramón Ramírez estrelló su camioneta contra otro vehículo ocasionando la muerte de cuatro personas. Estuvo pocas horas detenido, salió libre bajo fianza.