El mexicano Javier Aguirre , entrenador del Leganés , se mostró apenado por el descenso de su equipo a la Segunda División en España pero defendió la actitud de sus jugadores hasta el último partido, que se saldó con empate a dos contra el Real Madrid.
"Para la gente solo tengo palabras de agradecimiento. No han podido estar los once partidos con nosotros pero se ha notado su cariño, su apoyo. Dimos lo que teníamos, fuimos honestos y honrados hasta el final entendiendo nuestras limitaciones pero llegando vivos al ultimo partido",
dijo.
"Es una pena porque los jugadores entregaron todo lo que tenían, nadie se dejó nada. Lo siento por la afición. Espero que volvamos pronto a Primera, lo antes posible"
, añadió tras el choque disputado en Butarque.
En esa cita hubo una posible mano de Luka Jovic que pudo cambiar el resultado: "Soy un defensor del VAR, es la verdad. La herramienta me gusta mucho porque ve esos centímetros que dicen si hay o no fuera de juego, esas manos que son o no son. La herramienta me gusta pero la persona que decide si verlo o no, eso ya es cuestión humana".
"Si el árbitro arriba no ve punible esa mano, es su decisión y ya está. La decisión dependió de una sola persona que dijo, 'no vengas ni a verla porque no es mano punible'. Era una jugada jodida de ver. El de arriba ve la mano, la acepta, pero no la considera punible. Esa es la explicación que tenemos. Es la decisión de un árbitro y no hay nada más que decir", comentó.
Las adversidades inesperadas fueron otro detonante para el descenso: "Hay que añadir la temporada tan atípica, no tuvimos el aliento de la grada once partidos que nos da vida, nos empuja. El parón, ese inicio muy complicado con 9 derrotas en 12 partidos, con 5 puntos de 36".
"La salida de los jugadores clave en el esquema, la lesión de otros dos. Muchos factores que hacen que la consecuencia sea esta. Nos faltó un puntito, un golito. Lo tuvimos. Pusimos lo que teníamos y no alcanzo", analizó el ' Vasco' Aguirre .
Asimismo reconoció que es un momento duro: "Como entrenador probablemente sea mi momento más duro. Evidentemente las dos derrotas en los Mundiales de Corea y Japón y de Sudáfrica, que me eliminan y no me meto entre los ocho mejores, fueron muy duras porque representaba a un país y en ambos casos tenía mucha ilusión con esa selección. Fueron derrotas muy dolorosas".
"Esta es una experiencia nueva dolorosísima, el no poder darle para lo que te ficharon a la gente que confió en ti. Es muy duro de llevar. Ayudan los aplausos, que la gente te agradezca a pesar de todo. Sirve para ir cerrando lo antes posible la herida. Yo soy pepinero ya para siempre", declaró.
Sobre su futuro, indicó: " 'Siento que es mi despedida del Leganés. No fui capaz de cumplir el objetivo. Me sentaré a ver si quieren que continúe […] Soy hombre de fútbol, entiendo las circunstancias. Es mi primer descenso, nunca me había tocado. Es cruel, es duro porque veo un vestuario roto, llamas a la familia y están destrozados".
"Será una noche larga pero cuando uno da lo que tiene... vi a mis jugadores entregados, un colectivo muy involucrado pese a nuestras carencias. Esperaré a ver cuál es mi futuro, a ver qué sigue. No me puedo pronunciar, no tengo certeza de lo que va a suceder mañana", manifestó.
Por último deseó que el club retorne pronto a la máxima categoría: "Ojalá vuelva el Leganés lo antes posible. Hay una bonita base, chicos del filial, diez o doce jugadores con contrato, buenas instalaciones, buen presupuesto, muy buena dirección deportiva, conocimiento de la categoría... hay muy buena estructura para volver lo antes posible".