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Ya no se trata un simple manejo de crisis por la partida de Agustín Marchesín. El América podrá darle a su afición un portero de categoría, porque para el relevo bajo los tres palos se perfila Guillermo Ochoa . Esa es la prioridad en la cúpula amarilla y en estos días han logrado un 90 por cierto de las negociaciones, mientras el Porto hacía lo propio con el argentino.
Ochoa
busca mantenerse en la alta competición, algo que Europa brinda, aunque estar con las Águilas también le garantiza seguir en el Tricolor, otra de las razones que lo acercan a dar el “sí” y la firma.
Sin embargo, lo que separa al tapatío de la escuadra que lo debutó va más allá del dinero. El asunto, un dilema familiar, por no querer regresar al país.
Enorme labor la que le espera al América para ofrecerle garantías al portero cuya experiencia en el viejo continente, curiosamente, no ha sido peleada como se esperaría por los clubes europeos, una vez que finalizó su contrato con el Standard de Lieja , el 30 de junio pasado, y sus destacadas participaciones en los Mundiales 2014 y 2018. Pero la polémica no suelta a Memo, quien asegura que es jugador libre, mientras que el equipo belga alega una millonaria cláusula.
Incluso, el técnico Miguel Herrera no lo descartó, “Memo es súper atractivo, es un jugador importante de la liga y del americanismo”. Aunque hay optimismo en los esfuerzos por repatriar al jugador de 34 años de edad, los de Coapa contemplan otras opciones, dijo Herrera a ESPN: “Tenemos de cuatro a cinco en la lista”.
Por ejemplo, el uruguayo Martín Campaña, del Independiente de Avellaneda, sería viable. Su club fue demandado por el América ante la FIFA, por adeudos en el fichaje de Silvio Romero y Cecilio Domínguez, por lo que ambas escuadras podrían llegar a un arreglo; el brasileño Tiago Volpi y los argentinos Franco Armani y Esteban Andrada estarían en la mira.
Volar como dragones.
Difícil dar marcha atrás. Prácticamente están a horas de cambiar su plumaje por escamas y ambiciones personales. El Porto, por el combo de Marchesín y del mediocampista Mateus Uribe, desembolsará alrededor de 20 millones de dólares.
Ayer, ambos jugadores comenzaron con normalidad la práctica pero fue Marche quien rompió filas junto con el Piojo, para dirigirse a las oficinas del club.
Quince minutos después, el argentino regresó a la cancha, se quedó sentado en compañía de algunos utileros, con quienes pasó de la risa a una expresión de pesadumbre y supuestas lágrimas.
Posiblemente porque es triste decir adiós, aunque peor sacrificar más de 1 mdd de la cláusula para facilitar su salida, porque la Champions League no es el sueño, sino ganarse con mejores credenciales la titularidad de la Albiceleste rumbo al Mundial Qatar 2022.
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