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Con una gran actuación de Eduardo López y un buen funcionamiento del sistema ofensivo de Chivas , el Rebaño derrotó tres goles a cero al Atlético de San Luis , en la jornada cuatro del Apertura 2019. El número 10 de los rojiblancos fue el más aplaudido de la noche, fruto de un gol al minuto 15 y un gran aporte al ataque.
Contra San Luis, Eduardo López acabó con su sequía personal, en la cual acumulaba más de mil minutos y casi un año sin gol en Liga MX . Le bastaron 69 minutos para ganarse a la afición rojiblanca de nueva cuenta. Goles son amores y López fue el encargado de abrir el marcador. Con un zurdazo de afuera del área venció a Carlos Rodríguez y mandó a guardar la bola al fondo del arco.
El último tanto de “ Lalo ” se lo marcó al Veracruz en el Apertura 2018 , un 17 de agosto del 2018. Aquella noche se despachó con un doblete y le dio la victoria a su equipo.
Al minuto60, apareció el VAR , para que el central Fernando Hernández sancionara penal a favor de Chivas . Desde los once pasos Alan Pulido volvió a aparecer y marcó el segundo para el Rebaño.
A cinco minutos del final, un contragolpe del equipo local ocasionó una nueva falta dentro del área. Esta vez fue Osvaldo Alanís el que tomo la bola e hizo efectivo el cobro para poner saldo definitivo de tres goles por cero.
Chivas fue superior al cuadro visitante durante todo el encuentro. Principalmente en el segundo tiempo, donde todo fue color rojo y blanco. Oribe Peralta vio frustrado su primer gol luego de que el árbitro señalara posición adelantada, en el minuto 57. El “Hermoso” cabeceo frente al arquero potosino y mando la pelota al fondo de la meta. El fuera de juego ya había sido señalado.
Apenas al primer minuto, el Rebaño tocó la puerta de Felipe Rodríguez . Tras un tiro libre por el costado derecho, la bola quedo en el área. Jesús Molina buscó la pelota por arriba, pero en su afán de rematar, termino chocando fuertemente con el defensor Matías Catalán, lo que ocasiono que ambos jugadores sufrieran una herida en la cabeza.
En defensa, las dudas continuaron acechando al cuadro local. Algunas se convirtieron en acciones de peligro, otras quedaron en sustos. Para todas ellas Antonio Rodríguez se presentó en plan grande repeliendo las posibles amenazas sobre su portería.
