En Televisa ya están hartos de la forma en que Eduardo Brizio defiende a su hermano Arturo, presidente de la Comisión de Árbitros.
Desde que el hermano mayor llegó a la dirigencia de los silbantes, el menor justifica todo lo malo que hacen los de negro, tanto que ya hay quienes no ven el caso de tenerlo ahí, ya que para él, todo está bien y el arbitraje mexicano vive un mundo de caramelo.