La forma de juego del Guadalajara de Tomás Boy, según contó Antonio Briseño , está basada en un juego directo, con transiciones rápidas de defensa a ataque, basadas en la rapidez de sus jugadores.
Además, añade el zaguero, es una estrategia planteada con anterioridad por Boy y el resto de su cuerpo técnico, especialmente en el empate contra el Puebla , en el que arañaron un empate, facilitado por las decisiones arbitrales.
“Todo era parte de nuestro plan. Muchos no entienden que así planteamos el partido, con contragolpes, y así generamos los dos penaltis a nuestro favor. Así es nuestro estilo de juego y en general hemos tenido un buen desempeño [en el torneo]”, sostuvo Briseño .
Pero sus declaraciones contradicen la forma en la que Alan Pulido cree que juega el equipo. El delantero considera que tienen un juego de posesión. “Ante ellos [los del Puebla ] nos faltó tener mayor posesión de balón y llegar más por las bandas”, criticó el delantero.
Las contradicciones de ambos elementos son preocupantes, si se tiene en cuenta que los dos han sido titulares, pero los datos son lapidarios y, en el papel, le dan la razón a Briseño: en ninguno de sus tres juegos han superado el 51% de posesión del balón y así han podido hacer 24 disparos y tres goles.
Pulido
parece no haber entendido el planteamiento de Boy y eso explicaría el porqué no ha sido determinante en esos juegos. En su debut de Copa ante Santos , tendrá otra oportunidad de hacerlo.