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Después del fracaso en el Mundial Sub-20 , en el que no ganó un solo punto y por el que fue severamente criticado como estratega, a Diego Ramírez le viene encima otro tipo de cuestionamientos. Y es que para algunos egresados de la Escuela Nacional de Directores Técnicos de la Federación Mexicana de Futbol (ENDIT) que son de la misma generación del todavía estratega juvenil, resulta extraño que cuente con el título de entrenador, cuando no cumplió con las horas que se requieren en el curso.
Según nos cuenta, en dos años Diego asistió solamente a cuatro horas de clases, cuando el calendario marca 20 semanas por semestre y 12 horas de clases por semana. Incluso, esta fuente señaló que después se convirtió en profesor del ENDIT y Ramírez siguió sin aparecer, como si lo hicieron otros exfutbolistas o aspirantes a entrenador como Rafael Puente, Jaime Lozano, Joaquín Beltrán, Leandro Cuffre y Gerardo Torrado .
Y no es por pensar mal, pero según estas personas, o el título con el que dirige no es de la Federación Mexicana de Futbol y aplicó la de ir Nicaragua, o aprovechó su estadía y buena relación con la gente de Tijuana para ahí sacar el título, en la escuela que está en esta ciudad, luego de que incluso, en el antiguo Centro de Capacitación (CECAP) , en donde se impartían las clases, le negaron el “papelito” de primera instancia.
Como sea, se siguen sumando las voces que ponen en duda su conocimiento de temas tácticos y técnicos. Lo grave sería que haya dirigido en los Dorados del Ascenso MX y ahora a la Selección Sub-20 con un título express, patito o como quiera llamarle, sin quizá haber cumplido con las horas “pupitre” que otros de sus colegas si hicieron… Y lo peor, que el directivo encargado de su contratación o no se dio cuenta o se hizo de la vista gorda.
