Durante la tanda de los penaltis, Nahuel Guzmán picaba a los cobradores del . Robert Dante Siboldi se percató y le gritó al portero que se callara.

Fue entonces que, desde un palco, Ricardo Ferretti le reclamó al uruguayo no meterse con sus jugadores y el mismo uruguayo replicó.

Al término del encuentro, con la victoria en la bolsa, Siboldi buscó a Guzmán, quien fue apartado por Guido Pizarro, capitán de los felinos.

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El líder regiomontano exclamó que no querían pactar con el entrenador del Cruz Azul, reacción que calentó a Siboldi y empezaron los dimes y diretes.

Posteriormente, se volvió a involucrar el Tuca, al separar a su capitán, quien amenazó al uruguayo de esperarlo afuera del estadio para agarrarse a puñetazos.

Al final, ambos clubes partieron en sus respectivos autobuses y no pasó a mayores.

 

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