Al final se cayó la contratación del chileno Iván Morales para
¿Por qué? Pues por la razón de siempre: los promotores. Resulta que La Máquina ya tenía arreglado el precio a pagar por el atacante, pero a la mera hora los “agentes con antifaz”, salieron con que la comisión se debía pagar aparte del precio pactado, todo para evadir el pago de impuestos, una práctica muy común de estos personajes. Por esa razón, la directiva cementera dijo “No gracias”, y buscará otra opción.
Puedes leer: "Jugador abandona el futbol mexicano por ser víctima de racismo"