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continúa, de momento, pese a las peticiones del gobierno italiano y del sindicato de futbolistas de detener el campeonato por la propagación del nuevo coronavirus.
El partido que enfrenta al Parma y la SPAL comenzó una hora y media más tarde de los previsto, aunque sin público, respondiendo así al decreto gubernamental publicado el miércoles pasado con medidas para contener la propagación del coronavirus, como la disputa a puerta cerrada de los partidos de la Serie A hasta el 3 de abril.
Ninguno de los otros cuatro partidos previstos este domingo han sido por el momento aplazados, incluido el Juventus-Inter, segundo contra tercero, que puede resultar clave en la lucha por el 'Scudetto'.
El encuentro en Parma, ciudad situada en la región de Emilia-Romaña, una de las más afectadas por el COVID-19 , comenzó poco después de que el ministro de Deportes Vincenzo Spadafora pidiese la inmediata suspensión de la Serie A.
"No tiene sentido ahora, cuando estamos pidiendo a los ciudadanos enormes sacrificios para prevenir la propagación de la epidemia, poner en peligro la vida de jugadores, árbitros, aficionados que seguramente se reunirán para ver los partidos, no suspender temporalmente el futbol"
, declaró Spadafora en un mensaje publicado en Facebook.
Italia es el mayor foco de contagio por el COVID-19 en Europa
, con más de 5.880 casos y 233 decesos, según el último balance. La epidemia originada en China afecta ya a 98 países, con 105.836 casos de infección y 3.595 muertes, según un balance establecido por la AFP sobre la base de fuentes oficiales.
"Comparto las declaraciones de Damiano Tommasi, el presidente del sindicato de futbolistas italianos, y me uno a su demanda",
precisó Spadafora en su mensaje.
"Otras federaciones han decidido sabiamente parar en los próximos días. Creo que es el deber del presidente de la Federación (Gabriele) Gravina de reflexionar un poco, sin esperar el primer caso de contaminación"
en el futbol, añadió el ministro de Deportes.
"Parar el futbol es la cosa más útil para nuestro país actualmente",
había escrito este domingo en Twitter Tommasi.
"Los equipos a animar están jugando en nuestros hospitales, en las unidades de emergencia"
, añadió en referencia al personal sanitario.
Ante la rápida propagación de la epidemia, el gobierno italiano decretó este domingo medidas excepcionales de confinamiento, hasta el 3 de abril, de millones de italianos que viven en el norte del país.
Los desplazamientos de al menos 15 millones de italianos que viven en esa zona estarán estrictamente limitados a partir de este domingo.