En el futbol, como en la vida, hay fechas difíciles de olvidar. El 31 de mayo de 2014 es una de esas para Luis Montes , mediocampista de León.
El “Chapito”
vivía un momento de ensueño con el bicampeón León y su titularidad en la Selección Mexicana en el Mundial de Brasil 2014 era inminente; sin embargo, sucedió lo inesperado. Montes se lesionó días antes de la Copa del Mundo y causó baja del Tricolor dirigido por Miguel Herrera.
México enfrentó a Ecuador en el AT&T Stadium y Montes pasó en dos minutos del la alegría al sufrimiento. Al minuto 33 abrió el marcador con un disparo de fuera del área y dos minutos después, chocó con Segundo Castillo sufriendo una fractura de tibia y peroné.
El sueño había terminado y los gritos de desesperación reflejaban el dolor físico e interno que Montes experimentó aquel día en Estados Unidos. Cinco años después vuelve al estadio donde inició la peor etapa de su carrera para enfrentar a la misma selección, Ecuador.
El reto mental del “Chapito” es mayor . Inevitable será no recordar aquel oscuro día, como también lo será no temer ante una fuerte entrada. El subcampeón del futbol vuelve a enfrentar a Ecuador a días de que inicie la Copa Oro. Montes está convocado y los traumas serán difíciles de disipar.
Montes estuvo seis meses fuera de toda actividad y de a poco volvió a retomar el nivel que lo tuvo cerca de disputar su primer Mundial con la camiseta Tricolor.