futbol@eluniversal.com.mx
Previo al duelo de ida ante el Monterrey, Milton Caraglio precisó que Atlas no debía cometer errores ante una ofensiva rayada que no perdona, y justo sucedió arrancando el encuentro, lo cual le molestó, pero lo que más lo sacó de sus cabales, fue que el árbitro Luis Enrique Santander no marcara dos claros penaltis.
“Para mí es penalti la de la mano que yo cabeceo. La de Tabó también, cuando el arquero llega. Pero no me quiero poner un dilema con los árbitros, porque ante el Pachuca hubo dos penas máximas claras, una a Arreola, otra mano y tampoco marcaron”.
Para Caraglio no es nuevo que el nazareno deje de marcar cosas a los equipos en que milita, ya había vivido la misma impotencia defendiendo la casaca de Tijuana.
“El árbitro me dijo que no contestara más, mientras los demás jugadores le hablan y lo vuelven loco. No quiero saber nada de ellos. Pasó cuando estuve en Tijuana y no quiero poner excusas ni nada. Se lo dije al árbitro ‘no te diré más nada, pero pon atención’”.