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El debate lo comenzó hace algunos días Iván Marcone, ex jugador del Cruz Azul, ahora con Boca Juniors, quien reveló que Gerardo Martino, técnico de la Selección Mexicana, le había ofrecido jugar con el Tricolor: “Tata se acercó a mí y me consultó del interés que tenía de formar parte de la Selección Mexicana. Eso sería si hubiera permanecido en el futbol mexicano varios años. Sin duda, mi respuesta era que no”, dijo el volante.
Pero ¿hay material entre los naturalizados que militan en México para formar parte de la Selección Nacional?
En primer lugar, se debe cumplir con los requisitos que solicita FIFA para que un futbolista pueda jugar en una asociación que no sea la de nacimiento, es más complicado que antes.
Artículo 17. Adopción de una nueva nacionalidad Un jugador (...) sólo será elegible para jugar en el nuevo equipo representativo si cumple con una de las siguientes condiciones: a) el jugador nació en el territorio de la asociación en cuestión; b) uno de Ios padres biológicos nació en el territorio de la asociación; c) uno de sus abuelos nació en el territorio de la asociación d) ha vivido al menos cinco años continuos después de cumplir los 18 años en el territorio de la asociación en cuestión.
A este último punto se une el Apartado 1 del Artículo 15. Ningún jugador que haya participado (parcial o completamente), con una asociación en un partido de una competición oficial de cualquier categoría podrá participar en un partido internacional con el equipo representativo de otra asociación”.
El delantero de los Rayados de Monterrey, en 2011 jugó el Sudamericano Sub-20 defendiendo los colores de la selección de Argentina, por lo que está completamente descartado.
Aunque pedir no empobrece. Hay que recordar lo de Rubens Sambueza en la época de Miguel Herrera, que el caso fue a la FIFA, que decidió que el argentino no podía actuar con México por sus antecedentes.
