Ángel Zaldívar brilló con luz propia al clavarle un doblete al Toluca; sin embargo, al delantero de 24 años le falta pulirse.
En la recta final del choque que finalizó con empate entre Chivas y Diablos Rojos (2-2), en el Nemesio Díez, Zaldívar falló un mano a mano frente al guardameta Luis García, para dejar ir la posibilidad del primer triunfo rojiblanco en la Liga. Pausar la crisis del Guadalajara.
Aunque ha estado bajo las órdenes de técnicos como Benjamín Galindo, Juan Carlos Ortega, José Manuel de la Torre y Matías Almeyda, Zaldívar sospecha que su potencial se podría disparar ahora con José Cardozo. Ser como él y conocer los secretos que hicieron del paraguayo, uno de los mejores anotadores en México (249 goles).
Por el momento, el Chelo —apodo con el que se refieren a Zaldívar desde fuerzas básicas por su parecido con el Chelito Delgado—, cuenta con 17 tantos en Liga, siendo el Apertura 2016 su mejor semestre (5).
Aunque las cifras del rojiblanco distan abismalmente con lo hecho por José Saturnino, que en su mejor torneo rompió las redes en 29 ocasiones.
Además, Chelo Zaldívar cuenta con la fortuna de que Cardozo tiene la vocación de orientar y compartir sus secretos con los que se convirtió en la pesadilla de defensas y porteros.
“Sí [me aconseja], y mucho, después de los entrenamientos Pepe te dice cómo moverte, cómo recibía los pases y cómo hacía tantos goles... hay que sacarle el mayor provecho”.
Eso sí, antepone lo colectivo que la gloria individual, luego de recibir halagos por su actuación del domingo: “Trabajo para el equipo y como delantero, mi trabajo es hacer goles, estamos para sacar los resultados”.
Ángel perfila a no ser más la salvación divina del Rebaño. Desea volar con alas de un demonio del gol, como su ahora mentor Cardozo, el Diablo Mayor.
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