Un grupo de aficionados del West Ham ingresó hoy al campo de juego durante el encuentro del club londinense ante el Burnley e intentó abordar a los futbolistas.
Fueron imágenes escandalosas las que se vieron en el estadio del West Ham, que con la derrota por 3-0 en casa sigue hundiéndose en la clasificación.
Tras el primer gol del partido, anotado por Ashley Barnes a los 66 minutos, un hincha se metió en el campo e intentó increpar al capitán del West Ham , Mark Noble . Como ningún efectivo de seguridad se acercó para controlar la situación, el propio Noble derribó al aficionado y lo lanzó al suelo.
Entonces se metieron en el césped otros dos hinchas, aunque fueron repelidos por el defensor James Collins . Lejos de calmarse, la situación empeoró con la continuidad del encuentro y tras el 2-0 de la visita a los 70', obra de Chris Wood , un hincha tomó el banderín del córner y comenzó a correr con el palo como si fuera una jabalina antes de plantarlo en el centro del campo.
Además, un grupo de hinchas de los " Hammers " protestó frente a los palcos contra la directiva y pidieron la renuncia del presidente David Sullivan . El inversor debió retirarse escoltado por la policía.
El equipo dirigido por David Moyes marcha en decimosexto lugar de la clasificación y tras la derrota de hoy se encuentra cada vez más cerca de la zona de descenso.