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Nunca en la historia un equipo ha disputado el Super Bowl en su casa, y estamos en condición de anunciar que la tendencia para esta temporada se mantendrá, ya que las posibilidades de Falcons se desplomaron como la Bolsa Mexicana de Valores cuando se anunció el plan contra las comisiones que cobran los bancos.

En la era del Super Bowl, 12 equipos han llegado a Playoffs luego de arribar a la Semana 11 con récord de 4-6, como ahora tienen los Falcons, que no sólo suman dos derrotas en fila, sino que el jueves tendrán que viajar a Nueva Orleans para enfrentar a los Saints, uno de los tres mejores equipos de la Liga.

Con nueve victorias en fila, la marcha de Nueva Orleans se ha vuelto tan rápida como lo harán los clientes de las tiendas departamentales que correrán este viernes cuando se suban las cortinas para el Black Friday.

Drew Brees lanzó ayer 363 yardas y cuatro anotaciones para seguir cumpliendo con su currículum de MVP. Y los Saints han anotado 45, 51 y 48 puntos en las últimas tres semanas, respectivamente, la mayor cantidad en un periodo de tres partidos en la historia de la franquicia.

Son el cuarto equipo en la historia de la NFL en anotar 45 puntos en tres partidos consecutivos. Son candidatos al Super Bowl.

Con .500 los Boys sonríen por la desgracia ajena. Saben que la lesión del quarterback de Redskins, Alex Smith, les pavimenta el camino. Smith sufrió fractura de tibia y peroné en el aniversario 33 del día en que Joe Theismann sufrió una devastadora captura de Lawrence Taylor, que puso fin a su carrera. Una lamentable coincidencia que tiene en desvelo a Washington.

La temporada de Skins dio un giro sombrío y Cowboys celebra un Día de Acción de Gracias adelantado. El jueves enfrentan a Washington, que esta tarde entrevistarán a EJ Manuel, Mark Sánchez y otros cartuchos quemados para ser el remplazo de Colt McCoy, quien heredó la ofensiva.

Por loco que parezca, los Giants están empezando a creer que tienen la oportunidad de correr en los Playoffs. Vencieron a los Buccaneers con actuación mágica de Saquon Barkley con 142 yardas por tierra y tres anotaciones.

La llegada del dinámico Khalil Mack consolidó una defensa que ha forzado 27 pérdidas de balón, la segunda mayor cantidad en la NFL, pero es la secundaria de los Bears la que ha impulsado su recuperación.

Vencieron a los Vikings, contendiente sólidos, Chicago aún tiene que enfrentarse a una ofensiva tan poderosa como la de los Rams, y tampoco ha encontrado una carrera tan feroz. Una victoria contra Rams en la Semana 14, en el escalofriante frío de diciembre en el Soldier Field, revelaría si la defensa de los Bears es tan buena como ellos (y otros) piensan.

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