Los restaurantes en Mineápolis están completamente llenos. Con la temperatura a 19 grados centígrados bajo cero, los aficionados recargan toda la energía en la calefacción mientras desayunan.
Las donas tradicionales de la ciudad son el platillo favorito de los turistas y locales, que asistirán al US Bank para el Super Bowl LII , entre los Patriots y Eagles .
Cafés americanos, capuchinos, lattes, espressos y chocolates calientes rodean los precios entre dos y seis dólares.
Uno que otro entusiasta ya toma mimosas, para bajar los nervios... hoy su equipo puede coronarse en la NFL.
Las bajas temperaturas alejan a los aficionados de las calles pero no del Super Bowl LII.