La NFL disfruta del negocio y “obliga” a cada aficionado en Minneapolis de llevarse un recuerdo del Super Bowl LII.
En el centro de convenciones, uno de los espacios con más expansión es la tienda oficial de la Liga.
Jerseys, gorras, sudaderas, playeras, calcetines, llaveros, todo lo que se pueda imaginar está a la venta.
Los jerseys oficiales, con el nombre de las estrellas más importantes de los Eagles o Patriots, van de los 99 dólares hasta los 250. Casualmente se venden más los uniformes azules de Nueva Inglaterra, aunque jueguen de blanco este domingo. Por parte de Filadelfia, la playera de Nick Foles, quarterback titular para el SB LII , se encuentra en una esquina; la de Carson Wentz, hoy lesionado, en el mero centro del puesto del campeón de la NFC.
Los accesorios, como llaveros, varían entre 8 y 15 dólares. Las sudaderas, 150, y los calcetines, 35-45, si decides añadirles un adorno.
Así es el negocio de la NFL, que aprovecha cada oportunidad para picotear los bolsillos de sus aficionados.
