La gran duda que recorre las calles de la cumbre independista de Estados Unidos es si Nick Foles está a la altura para enfrentar la postemporada.
No es la primera vez que el quarterback, de 28 años de edad, juega Playoffs vestido con el uniforme de los Eagles. El 4 de enero de 2013, Filadelfia fue eliminado en la ronda de comodín por los Saints de Nueva Orleans.
Cinco temporadas y dos equipos después —Rams de San Luis y Chiefs de Kansas City—, Foles regresa a Playoffs, pero en un papel diferente.
Es el quarterback suplente de Filadelfia, el que tuvo que entrar por la lesión de rodilla de Carson Wentz, quien mantuvo a los Eagles como primeros de la Conferencia Nacional y apuntaba como el Jugador Más Valioso de la campaña. Desde la baja del pasador estelar, la ofensiva se ha visto mermada.
La poca experiencia de los jugadores de Filadelfia en postemporada puede afectarles esta tarde.
Aunque Eagles (13-3) ocupó el primer sitio de la Conferencia, los Falcons de Atlanta lucen como favoritos. Parte de esa condición deriva del trabajo impresionante que Atlanta (11-6) realizó para eliminar a domicilio a los Rams de Los Ángeles en la ronda de comodines.
Matt Ryan manejó el partido de la semana pasada a su placer. Para el duelo de hoy también tendrá el control del cronómetro y se encargará de mantener el ovoide en la ofensiva para sacar el resultado.