Para los jugadores que disputarán el Tazón México III tiene un ingrediente extra: el estadio Azul .
Tanto Mexicas como Raptors abandonan sus respectivas casas, el Jesús Martínez “Palillo” y la UVM de Naucalpan , con la misma aspiración, la primera corona en su corta existencia.
“Los jugadores saben que estarán en la historia de la LFA ”, dijo Óscar Pérez , presidente de la Liga. “Están motivados por poder disputar el título en un inmueble tan histórico, como es el Azul”.
La tierra que se levanta en el Palillo o el caucho pesado en Naucalpan quedan a un lado para esta tarde. Hoy es una nueva cara de la LFA .
El ejecutivo agregó que tener un estadio tan emblemático en la Ciudad de México es “como acelerar a todo para elevar”.
Pérez
explicó los pasos que ha dado la organización en sus primeros tres años de vida y lo que planea en un futuro cercano.
“La primera temporada fue el nacimiento. La segunda, de expansión. Ésta, que llega a su fin, fue de consolidación. Para la que viene -con una expansión a 10 equipos- es la de rentabilidad”.