La NFL pasó 100 temporadas
para llegar a este punto:
Castigos, pañuelo para desafiar los castigos, locutores discutiendo castigos y público tanto en el estadio como en redes sociales abuecheando por el inicio de la Liga.
El primer partido con el que la NFL celebra la campaña 100 fue prácticamente una involución.
“No es precisamente el juego que se esperaba”, escribió en Twitter Kurt Warner, miembro del Salón de la Fama.
Tan inesperado como la calidad del juego fue el resultado. A tropezones, los Packers derrotaron 10-3 a los Bears.
La fiesta en Soldier Field terminó con menos de dos minutos en el reloj, cuando Mitchell Trubisky fue interceptado en la zona de anotación por Adrian Amos.
El crucial intercambio de balón fue el último clavo con el que los usuarios de Twitter crucificaron a Trubisky por su pobre actuación.
Gracias a su defensiva —acostúmbrense a leer esto—, el quarterback de Chicago —no sabemos por cuánto tiempo más—regresó al campo con un minuto y 15 segundos en el cuarto periodo, pero con el mismo resultado de toda la noche: improductivo.
Chicago sumó más castigos (10) que puntos en el marcador y esa no es la estadística que más duele.
Los Bears extendieron a seis la racha de derrotas en partidos de inicio la temporada.
¿Algo más?
Los 53 ganadores del Super Bowl tienen un récord de 43-9-1 en el fin de semana inaugural.
Los vientos soplan en contra para Chicago y amenazan con convertirse en un huracán, si Trubisky no ofrece más de los 26 pases completos de 45 que intentó para 228 yardas y una intercepción.
De Green Bay lo mejor fue el bigote de Rodgers y su pase de anotación con Jimmy Graham.