Más Información
En México 4.5 millones de menores son víctimas de abuso sexual cada año; México, primer lugar en incidencia, según reporte
Ella es Anavel Ávila, la alcaldesa de Coalcomán ligada al CJNG; se le investiga por desaparición de personas
Senado no descarta periodo extra; sería para reformas a favor de migrantes, ante amenaza de deportación masiva en EU
Sheinbaum dará mensaje el lunes sobre alcaldesa de Coalcomán que agradeció a “El Mencho”; es líder del CJNG
ramon.trevino@clabsa.com.mx
Más que buscar acceder a la ronda de Playoffs, los Athletics de Oakland deben enfocarse en ser competitivos; al menos para atraer a más gente al O.Co Coliseum.
Ya son tres años consecutivos que quedan últimos en el Oeste de la Liga Americana, y su “reconstrucción” no ha funcionado.
Las cabezas de la franquicia piden paciencia a los aficionados en la Bahía. No es sorpresa que Athletics fuera el penúltimo lugar en asistencia durante 2017. Únicamente promedió 18 mil 219 personas por encuentro.
Un año antes, la novena también fue segunda en recibir la peor taquilla en Grandes Ligas, con 18 mil 784 fanáticos en los 81 juegos en su casa, con dirección en Coliseum Way #7000.
El último buen recuerdo que dieron los californianos a su afición se remonta a 2014, cuando clasificaron a Playoffs como quintos de la Liga Americana (88-74). La alegría duró poco, ya que en la ronda de comodínes cayeron frente a los Royals de Kansas City.
Desde entonces, no han hallado el nivel necesario para ir a postemporada. Pinta igual este 2018.
Oakland mantiene una base de pitchers abridores joven, 25.6 años en promedio. Ningún veterano de mil batallas, mas tampoco son novatos. La apuesta estará en Kendall Graveman, lanzador de 2.36 millones de dólares, quien necesitará estar sano para mantener el balance en la costa del Pacífico.
Si Athletics consigue aguantar el ritmo con el que cerró el año pasado, 17 triunfos en 24 juegos, lograría no ubicarse como el último del Oeste por cuarto año en fila.
Otro punto a favor para el equipo se llama Khris Davis, una potencia sobre el plato. El bateador designado conectó durante 2017, 140 hits, 43 cuadrangulares y 110 carreras impulsadas.
El californiano será el encargado de cargar la ofensiva de Athletics. Davis siempre se mantiene en buen estado físico —la campaña pasada estuvo 153 juegos— y es constante con el bat.
Será cuestión de esperar a los jóvenes lanzadores, la fuerza y precisión de Khris Davis, el trabajo con el bullpen y si la experiencia de Bob Melvin logra maquillar un poco el pasado reciente de la franquicia del empresario John J. Fisher.
En caso de que el Coliseum, fundado en 1968, continúe con mala entrada, dependerá de los directivos encontrar otra solución que no tenga que ver con la pelota. En septiembre de 2017, adelantaron que se buscará un nuevo espacio para renovar al equipo, con una sequía de Serie Mundial desde 1989.
En la NFL, los Raiders ya decidieron hacer maletas y mudarse a Las Vegas, una ciudad llena de billetes verdes.
Dave Kaval, presidente de Athletics, busca renovar a la franquicia. Entregar al pueblo de Oakland una imagen moderna y ganadora. Ya veremos para cuándo.