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Zenith trae al país azteca la gira de la celebración del 50º aniversario de El Primero. Ciudad de México está en el mapa de esas doce capitales mundiales para la histórica firma de Le Locle. “Una cena sentados a la mesa, un evento agradable en el que regresaremos a los momentos clave de El Primero”, comenta Julien Tornare, CEO de Zenith. “Es algo muy especial. Serán 50 personas, algo más íntimo”. Tornare viaja con la caja del aniversario en la maleta. “Latinoamérica es el mercado para nosotros. El Primero es un nombre en español y hay muchas cosas por hacer. Zenith es una marca latina en espíritu. Tenemos mucho por hacer en México”, asegura con entusiamo. “Hablé con Rick De La Croix (distribuidor de la firma en la región) y hay mucho camino por andar, es seguro que creceremos ostensiblemente en esta región”.
La gran estrella del año es el nuevo Defy Inventor, ¿cuál es el cambio con respecto al Defy Lab?
El 14 de septiembre del 2017 introdujimos el Defy Lab. Estaba muy feliz de presentar estos guardatiempos, cada uno es diferente. Obtuvimos 10 clientes que los compraron. Les dije que no estaba seguro de que fuera a funcionar porque se estaba cocinando en el laboratorio y era muy innovador. Funcionó bien. Luego el gran reto para mí fue ir de pocos prototipos a la producción industrial, que es un gran paso. En la industria relojera puedes hacer todo lo que quieras pero en pocas piezas, trabajando en un prototipo. Lo difícil está cuando quieres hacer una producción real. Siempre pensé que el único éxito se daría cuando lográramos hacer el Defy Lab en una producción, de otra manera nunca toca el mercado. Durante este tiempo yo estaba lanzando el Defy 21 con el que fui por todo el mundo y siempre tenía el prototipo del Defy Inventor en mi bolsillo. Lo podía sentir aún en México, lo hice el año pasado durante el SIAR. Todos me decían que amaban el sistema y que tenía que seguir con eso. Ahora estoy muy feliz del lanzamiento del Defy Inventor. Algunas diferencias son que pasamos de 15 Hertz a 18 Hertz con este nuevo. Y no es la caja completa de Aeronith, porque quería respetar a las 10 personas que compraron los primeros, así que no podía tener el mismo look. Este nuevo solo tiene el bisel de Aeronith. Aparte de esto, el sistema es muy similar. Es atérmico, es decir que no tiene una sensibilidad a la temperatura. Es antimagnético, no hay fricción, así que no hay aceite. Y una sola placa de silicio como oscilador, ya no hay órgano regulador. La dificultad es que produciremos muchos todavía. Tenemos 200 piezas que nos pidieron en Baselworld. Es una locura total. A las personas les encanta, pero el problema es que todavía es difícil producir el sistema y tenemos que hacer correcciones a mano. Este año no podré hacer más de 200 o 300 máximo.
¿El nuevo oscilador se puede combinar con un tourbillon, un cronógrafo u otras complicaciones?
Sí, lo haremos en el futuro. Todavía es muy pronto. Podremos hacer muchas cosas. También tenemos la posibilidad de reducirlo y que mantenga las mismas propiedades, el mismo desempeño. Esto es solo el principio.
Junto a este producto avant-garde, mantienen la tradición de El Primero. ¿Cuál es el balance entre las diferentes colecciones?
Es muy fácil. Tenemos la línea clásica Elite, una colección elegante y sencilla que estamos rediseñando para que sea un poco más agradable. Y la Chronomaster, que está muy conectada al original El Primero con los tres contadores. Diría que estos dos se inclinan más hacia el lado clásico. Luego tienes todos los Pilot que versan sobre estilo de vida y aventura. Haremos algunas cosas nuevas creo que el año que entra con el Pilot para animarlo más. Y está el Defy que es modernidad, es el futuro, es el laboratorio en el que pondremos grandes complicaciones. Es la línea en la que podemos crear y traer nuevas cosas todo el tiempo. Es un buen balance y sabes que somos una marca grande y longeva con 150 años de historia, pero estamos construyendo el futuro. Vamos a ser contemporáneos.
La herencia de siglo y medio siempre es importante.
Todos dicen que son auténticos y por supuesto que nadie va a decir lo contrario, pero ¿qué es ser auténtico? Para mí son dos cosas. ¿Cuántas marcas pueden decir hoy en día que el 100% de sus relojes tienen un movimiento Zenith in house? No muchas. Somos muy auténticos porque en cada uno de nuestros relojes, el movimiento es propio. Y el segundo punto es que nos mantenemos fieles a como somos. Si te fijas en lo que hacemos estamos expresando precisión y cronometría. No voy a hacer un reloj conectado mañana, no es para Zenith. No voy a empezar a mezclar los materiales porque hay otras marcas que son muy buenas en eso. Nos vamos a mantener como somos y eso para mí es auténtico. Y porque tengas una gran historia que te empuje a querer mantenerte auténtico a ti mismo, no quiere decir que no seas contemporáneo. No por tener 150 años, te debes vestir como tu abuela, así que tendremos eventos cool en los que la gente se divierta. Tendremos piezas contemporáneas, innovación, creatividad, el espíritu de un emprendedor. Tenemos una larga historia pero vivimos en el siglo XXI.
El Primero estuvo dentro del corazón de los relojes más icónicos como el Daytona. ¿Sigue siendo Zenith proveedor de calibres para otras marcas?
El año pasado estaba sorprendido. Tuvimos muchas peticiones de dos o tres marcas. Pero mi primer trabajo es construir mi firma, que Zenith sea una marca, no una manufactura de movimientos. Continuaremos desarrollando nuestra marca y el movimiento debe ser para nosotros, y tal vez ayudar a algunas marcas dentro del grupo LVMH, pero no para externos por ahora.
Este año Zenith viene a CDMX con la caja del 50º aniversario de El Primero.
Sí, es fantástico. La caja es un gran éxito porque, de nuevo, celebramos la alta frecuencia y la cronometría. Pero de una manera interesante porque la original es de 1/10, 1/100 y una pieza que no existe, así que es una prueba de cómo conectamos la tradición con algo que no existe que significa el futuro. También traeremos tres revivals, en oro rosa, blanco y amarillo, tres ediciones de 50 ejemplares cada una. Quiero mantenerlo muy exclusivo para que solo algunos coleccionistas lo tengan. Y pensé que teníamos que hacer algo especial. El día anterior tuvimos reuniones sobre la garantía: 3 años, 5 años, ¿pero qué podemos hacer? Las personas están cansadas de pagar la garantía y las reparaciones. Así que pensé que para la celebración debíamos ofrecer 50 años de garantía. Incluir todo, hasta el servicio. Compras el reloj y no vas a pagar nada durante 50 años. Y en la cena a la que estarán invitados tendrán un documento que los invitará a celebrar otros 50 años de El Primero. Si sigo en este mundo a los 97 años, espero que me inviten también para decir que yo estuve aquí hace 50 años. Es algo muy especial.
¿Esta garantía es solo para la edición especial?
Sí, después de esto tendremos otras cosas nuevas para otras piezas. Todo se enfoca en este tipo de celebraciones. Te contaré una historia. Hace un mes estuve en un almuerzo con el hijo Charles Vermont y otras seis personas más. El más joven nació en 1945 y el mayor nació en 1933. Todos trabajaron para Zenith cuando se creó El Primero y todos conocían bien esto. Fue un almuerzo fantástico. Los invité a Basel y vinieron para contar las historias. Soy muy afortunado de tener testimoniales vivos que cuenten lo que pasó en ese momento.
¿Cómo ve Baselworld y cómo lo ve en el futuro?
Basel para nosotros este año ha sido muy bueno. Estoy muy feliz, tuvimos mucho más negocio. Estoy muy feliz y agradecido por esto, hay muchas novedades, una nueva campaña. Es todavía un buen show y sabes que Baselworld va a proponer un nuevo concepto para el 2020, mucho más dinámico y más abierto al mundo. Organizamos una gran fiesta hace tres días y vinieron el CEO de Baselworld y los ejecutivos de alto nivel. Me agradecieron mucho el evento porque dijeron que eso era exactamente lo que necesitaban para Basel, grandes eventos, celebridades y que las personas vayan para que brille más. Lo único que sigue pasando es que es muy caro, algo que aún se comenta entre las firmas. Siguen diciendo que es bueno, pero cuestionan si realmente necesitamos tener un gasto así. Tú y yo podemos hacer esta entrevista en la Ciudad de México en tu oficina, o en la mía. Algunas personas nos dicen que preferirían gastar el dinero en obtener nuevos clientes en el mercado y no en Baselworld.
Zenith abrió un programa de visitas a la manufactura. ¿Cómo está funcionando?
Sí, cada viernes. Va funcionando bien. Cuando estoy en Suiza, el viernes siempre trato de bajar y saludar a las personas que vienen. Conocí a unos clientes mexicanos que nos visitaron hace unas semanas. La última vez había algunas personas de Tailandia, unos peruanos y algunos locales de Neuchâtel, así que es una combinación interesante. Me gusta la filosofía de abrirlo a visitas públicas.
Este año lanzaron una edición especial con los habanos Trinidad y sigue la colaboración de Defy con Land Rover.
Sí. Es bueno siempre tener alguna alianza. Es muy importante hablar de la marca. Estratégicamente, es interesante trabajar con otros socios y obtener para ambos una exposición hacia nuevos clientes. Eso es lo que realmente estamos haciendo con Land Rover y con Cohiba. Nos da la oportunidad de entrar en nuevos círculos de clientes, y viceversa. En un evento de puros en un club de Beirut este año, vendimos 16 piezas en 3 horas. Fantástico. Es Líbano, es un país chiquito y el ambiente que reúne el placer de fumar los puros y la marca es bastante natural, funciona.