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El bronce fue la primera aleación de metales realmente útil para la humanidad. De hecho, existe un periodo histórico con su nombre: la Edad de Bronce. Trabajar este metal en condición pura o bruta resulta muy complejo, pues tiende rápidamente a degradarse o envejecer. Ahora, Corum ha logrado desarrollar una caja en bronce puro con tratamiento patinado exclusivo. Se trata del nuevo Admiral AC-One 45 Chronograph Bronze, reloj de carácter marino que se refleja en las tonalidades de su caja, que van del castaño al chocolate. Para acentuar su perfil oceánico, la esfera de la pieza se ha elaborado en madera de teca, mientras que sus vetas verticales rememoran el origen náutico de la colección Admiral.
Alrededor de la carátula se despliegan 12 gallardetes que históricamente han representado los índices de la colección. Los sobrevuelan grandes agujas esqueletadas animadas por un cronógrafo de calibre automático con reserva de marcha de 42 horas. Para finalizar, este conjunto posee una correa de piel especialmente diseñada en los mismos tonos que la caja de 45 mm. Tiene funciones de horas, minutos, segundos y fecha. La correa incluye hebilla con triple cierre desplegable de acero inoxidable. Es sumergible 300 m.