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Entre las diversas alternativas que existen para cuidar de nuestra salud, la inclusión de suplementos nutricionales es una de las más difundidas. Son los especialistas de la salud quienes recomiendan a sus pacientes la inclusión de determinados nutrientes a través de suplementos y es que sus beneficios han sido ampliamente verificados.
Los suplementos contienen nutrientes como vitaminas, minerales, proteínas, fibra dietaria, lípidos, aminoácidos, hierbas y glúcidos o carbohidratos. Por lo general, son recomendados cuando la persona presenta algún déficit de alguno de estos nutrientes o precisa reforzarlos para proteger su salud.
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Quiénes deben evitar el magnesio
Los suplementos son productos especialmente formulados y destinados a suplementar la incorporación de nutrientes en la dieta de personas sanas, que presentan necesidades dietarias básicas no satisfechas o mayores a las habituales, explica el Ministerio de Salud de Argentina. El organismo aclara que una dieta balanceada provee de todos los nutrientes que el cuerpo precisa por lo que, salvo casos especiales, los suplementos no serían necesarios.
Entre estos suplementos aparece el del mineral magnesio, un nutriente que importante para muchos procesos que realiza el cuerpo ya que regula la función de los músculos y el sistema nervioso, los niveles de azúcar en la sangre y la presión sanguínea. Además, ayuda a formar proteína, masa ósea y ADN, según un informe de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.
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La Universidad de Granada (España) remarca que la deficiencia de magnesio se encuentra relacionada con un gran número de alteraciones neurológicas, cardiovasculares, renales, gastrointestinales y musculares. Sus expertos advierten además que la ingesta de este mineral está un 30% por debajo de la ingesta diaria recomendada lo que, sumado a los malos hábitos de alimentación, puede traer como consecuencia numerosos problemas para la salud. Este es uno de los principales motivos por lo que los médicos alientan a sus pacientes a utilizar suplementos nutricionales.
Más allá de sus beneficios, algunas personas no deberían consumir suplementos de magnesio. Se trata de quienes padecen algunas de estas enfermedades:
- Insuficiencia renal: los riñones eliminan el exceso de magnesio del organismo por lo que podría causarse una acumulación de este mineral que podría ser perjudicial.
- Trastornos cardiovasculares: aumentar los niveles de magnesio podría interferir en el ritmo cardíaco y provocar arritmias.
- Problemas gastrointestinales: se debe a que estos trastornos hacen dificultosa la absorción de este mineral.
- Diarrea crónica: cuando la presencia de este mineral es grande ofrece un efecto laxante.
- Hipermagnesemia: se trata de una condición en la que se evidencia un nivel excesivamente elevado de magnesio en la sangre.
- Mujeres embarazadas y en período de lactancia: en estos casos la ingesta de suplementos de magnesio debe ser prescripta y supervisada por un médico.
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