En redes sociales circularon varios videos en los que se observa la actividad volcánica que tuvo el Popocatépetl durante las primeras horas de este sábado 20 de mayo.
Incluso el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), anunció en su cuenta de Twitter que cerraron operaciones alrededor de las 04:25 horas, debido a la presencia de ceniza volcánica. La demora para los pasajeros que esperaban viajar a esas horas de la madrugada fue de aproximadamente seis horas.
En otra publicación, anunciaron que reanudaron operaciones a partir de las 10:00 horas: “Luego de retirar las cenizas volcánicas, revisar las pistas y verificar condiciones de viento favorables, reanudamos operaciones de despegue y aterrizaje a partir de las 10:00 horas”, anunciaron.
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Las exhalaciones y explosiones fueron captadas por cámaras del Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED), de igual forma fueron difundidas a través de distintas plataformas digitales.
Algunos lugares en el estado de Puebla y en la Ciudad de México, se cubrieron de ceniza volcánica, producto de la actividad del Popocatépetl.
Lo anterior, desató bromas y también la oportunidad de emprender. Y es que un usuario de Facebook se viralizó porque pretendía vender el kilo de ceniza en 11 mil pesos.
Fueron varios internautas que tomaron captura de pantalla para difundirla. Pese a las burlas, muchos se cuestionaron si la ceniza volcánica realmente tiene un uso benéfico.
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De acuerdo con información de un artículo publicado por BBVA, las cenizas de un volcán pueden ser útiles en la preparación de Puzolanas, que es un tipo de material utilizado en la fabricación de cemento.
En el texto mencionan que los antiguos romanos hacían uso de este material para las construcciones.
Asimismo, la ceniza puede ser útil en los cultivos, ya que retiene la humedad del suelo y la mineraliza. Es por ello que algunos agricultores la usan como fertilizante.
No obstante, se debe tener cuidado al manipularla porque puede causar irritaciones en la piel, daños en las vías respiratorias y en los ojos.
ayef