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La anemia es un problema que aparece cuando las personas no cuentan con suficientes glóbulos rojos sanos o hemoglobina para transportar oxígeno a los tejidos de su cuerpo. Desde Mayo Clinic afirman que tener anemia puede provocar cansancio, debilidad y falta de aire, sin embargo existen otros síntomas a los que debemos estar atentos.
Para comprender qué es la anemia, debemos saber que la hemoglobina es una proteína que tenemos en los glóbulos rojos y se encarga de transportar el oxígeno desde los pulmones a los demás órganos de nuestro cuerpo. Cuando la hemoglobina se altera, aparece la anemia y esta puede ser leve o grave. Además, indica Mayo Clinic, puede ser tomada como una advertencia de una enfermedad grave.
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Síntomas de la anemia
Cuando la anemia está afectando a nuestra salud por lo general se recomiendan suplementos o algún procedimiento médico para tratarla. De todos modos, se hace hincapié poder tener una vida con hábitos saludables que incluyan el consumo de alimentos balanceados y beneficiosos para la salud.
Desde los Institutos Nacionales de la Salud remarcan que cuando aparece la anemia sus síntomas pueden ser leves en una primera instancia e ir aumentando a medida que la deficiencia informada comienza a elevar su nivel. La consulta al médico siempre será la primera recomendación a tener en cuenta en caso de comenzar a tener algunos síntomas para poder dar con el diagnóstico adecuado.
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En este marco, tanto Mayo Clinic como los Institutos Nacionales de la Salud han llegado a un punto en común sobre la anemia. Se trata de que los síntomas pueden ser variados, dependiendo de las causas que la hayan generado y, por supuesto, de su gravedad. A continuación te enumeramos los 13 síntomas que puede sentir una persona que padece anemia y a los que debe estar atento para acudir al especialista y cuidar su salud.
- Debilidad.
- Desmayos.
- Sangrado.
- Escalofríos.
- Dificultad para respirar o falta de aire.
- Palidez.
- Cansancio.
- Dolor de cabeza.
- Mareos o aturdimiento.
- Dolor en el pecho.
- Latidos irregulares.
- Manos y pies fríos.
- Ictericia o coloración amarillenta de la piel.
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