Los tienen un lenguaje propio que va más allá de los ladridos: su cuerpo es una herramienta de comunicación. Desde el movimiento de la cola hasta el cambio en la posición de las orejas, cada gesto de este animal puede revelar lo que siente o piensa. Eduarda Piamore, Técnica en psicología, educación y adiestramiento canino y felino, manifiesta que conocer estas señales no solo fortalece el vínculo con tu mascota, sino que también es clave para cuidar su bienestar.

Perros alegres y saludables

Cuando un perro está feliz, es fácil notarlo. Una cola que se agita vigorosamente, ojos brillantes y una boca ligeramente abierta en una expresión que parece una sonrisa son indicios claros de su alegría. También pueden revolcarse en el césped o buscar nuestra atención con entusiasmo. Además, un perro feliz suele ser activo, curioso y sociable, disfrutando de los paseos, los juegos y la interacción con otros perros o personas.

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Es importante no confundir la felicidad con la sobreexcitación, que puede llevar a comportamientos descontrolados y en algunos casos, perjudiciales. Mantener un equilibrio emocional en nuestras mascotas es esencial para su bienestar.

Un llamado de atención

La tristeza en los perros se manifiesta con una postura encorvada, orejas caídas y movimientos lentos. Algunos también pierden el apetito, muestran somnolencia o se aíslan. Aunque todos los perros pueden sentirse tristes en algún momento, una tristeza prolongada puede ser indicativa de depresión o problemas emocionales más profundos y requiere atención especializada.

El lenguaje corporal de los perros es una ventana a su mundo emocional. Fuente: Freepik.
El lenguaje corporal de los perros es una ventana a su mundo emocional. Fuente: Freepik.

Una emoción natural pero gestionable

El miedo es una reacción natural en los perros que los protege de amenazas. Sin embargo, señales como temblores, lomo erizado, cola entre las patas o rigidez corporal indican que el perro necesita sentirse seguro. En casos de miedo extremo, como el causado por ruidos fuertes, buscar refugio o la compañía del tutor son comportamientos habituales.

Alerta temprana

El estrés prolongado puede afectar gravemente la salud de un perro. Señales como hipersalivación, jadeos excesivos o comportamientos repetitivos, como lamerse o excavar, son indicadores de tensión acumulada. Identificar y abordar las causas del estrés es fundamental para prevenir problemas de comportamiento o salud más graves.

La comunicación del cariño

Los perros tienen formas únicas de expresar afecto. Desde lamer suavemente hasta apoyarse en sus tutores o buscar contacto visual, estos gestos demuestran su vínculo y confianza. Sin embargo, es importante respetar sus límites, no todos los perros disfrutan de abrazos o manipulaciones bruscas.

Comprender el lenguaje corporal de los perros no solo mejora nuestra relación con ellos, sino que también nos permite responder a sus necesidades emocionales y físicas. Al observar atentamente sus gestos y comportamientos, podemos garantizar que nuestros compañeros de vida se sientan seguros, felices y amados.

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Para aprender más sobre el fascinante de los perros, te invitamos a consultar con un veterinario o etólogo si notas cambios preocupantes en su comportamiento.

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