El tipo de alimentación que tenemos se basa en nuestros conocimientos, nuestras emociones y nuestras habilidades, explica el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social de España. En este marco, remarca que para cuidar de nuestra salud debemos de comer variado, tener en cuenta el tamaño de las raciones, reducir el consumo de alimentos ricos en grasas saturadas, sal y azúcares añadidos y priorizar al agua como bebida para quitar la sed.
Desde la Organización Mundial de la Salud afirma que una alimentación balanceada es una de las bases para la salud, el bienestar, el crecimiento óptimo y el desarrollo, y protege contra todas las formas de malnutrición. El organismo recomienda una dieta rica en cereales integrales, verduras, frutas, legumbres y nueces, y baja en sal, azúcares libres y grasas.
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Entre los alimentos recomendados para una alimentación saludable se encuentran los frutos secos, según la Universidad de Barcelona (España) que indica que estos tienen un elevado contenido de nutrientes que son muy beneficiosos para el organismo. Sobre estos indica que se los debe consumir "al menos tres veces por semana".
Nueces, avellanas, almendras, anacardos, piñones y pistachos son solo algunos de los frutos secos más conocidos, indica la Universidad Pompeu Fabra (Barcelona) y destaca que en conjunto gozan de muy buena prensa que los asocia con diversos beneficios para la salud, principalmente con la reducción del riesgo cardiovascular.
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Incluir a los frutos secos en nuestra alimentación contribuye a nuestra salud, pero los expertos advierten que se debe realizar un consumo que no sea en exceso. La ingesta sin control de este tipo de alimentos puede traer consecuencias negativas a nuestros riñones debido a su contenido de oxalatos, una sustancia que contribuye a la formación de cálculos renales. Además, su aporte de fósforo también puede perjudicar el funcionamiento renal, pero también la salud cardiovascular y ósea.
Al respecto, desde la Fundación Española del Corazón aconsejan una ración de 20 a 30 gramos de frutos secos como medida adecuada. Además, explica que se pueden consumir de 3 a 7 veces por semana.