Frank Pugliano, un veterano de la Segunda Guerra Mundial, no solo es conocido por su heroico servicio en el conflicto bélico, sino también por su increíble longevidad y vitalidad a los 103 años. Nacido en Italia y emigrado a Estados Unidos a los seis años, el exmilitar ha sorprendido a muchos al compartir su 'regla de oro' para vivir más de un siglo.
Tras graduarse de Penn Hills High School en 1942, Frank Pugliano se alistó en el ejército estadounidense y sirvió durante tres años en la Segunda Guerra Mundial. Durante su servicio, participó en una peligrosa misión de convoy a Luzón, en Filipinas, donde sobrevivió a un ataque con torpedos japoneses. Después, regresó a casa y se casó con su novia Mary Strough, con quien tuvo dos hijos y disfrutaron de un matrimonio de 65 años hasta el fallecimiento de ella en 2011.
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Una vez retirado del ejército, Frank Pugliano continuó trabajando hasta los 98 años, realizando tareas de mantenimiento en High View Acres, una comunidad residencial para personas mayores.
El pasado 6 de junio, Frank Pugliano celebró su cumpleaños número 103 en Boyce Park, en las afueras de Pittsburgh, Pensilvania. Durante la celebración, rodeado de familiares y amigos, brindó una entrevista vestido con la icónica camisa y gorra de veterano, disfrutó de la compañía de sus seres queridos y se tomó el tiempo de compartir su valiosa experiencia ante las cámaras.
Frank Pugliano compartió que todavía corta el pasto de su casa y realiza tareas domésticas. Mantenerse activo y ocupado parece ser una de las claves principales de su longevidad. Además, atribuye su longevidad a una combinación de factores, que él llama su 'regla de oro':
“El médico me dijo: ‘Haz lo que estés haciendo’”, comentó Frank Pugliano sobre su excelente salud, ya que a sus 103 años, apenas sufre algunos problemas en las rodillas y asegura que come lo que quiere.
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La 'regla de oro' de Frank Pugliano es simple pero poderosa: mantenerse activo, disfrutar de lo que amas y nutrir el cuerpo y el espíritu con buenos hábitos y una actitud positiva. Su vida es un ejemplo brillante de cómo vivir plenamente cada día, sin importar la edad.