El té de cáscara de mandarina ha ganado popularidad como un remedio casero para promover un sueño reparador. Aunque no existen pruebas científicas que demuestren que esta bebida pueda inducir el sueño en pocos minutos, sus múltiples beneficios la convierten en una opción ideal para incluir en la rutina nocturna. Además, su preparación es sencilla y sus propiedades, sorprendentes.
Beneficios de la cáscara de mandarina
La cáscara de mandarina, a menudo descartada, es una fuente rica en nutrientes. Según un estudio de la Universidad Central de Venezuela, contiene mayor cantidad de fibra dietética en comparación con otros cítricos, como la naranja o la toronja. Esta fibra favorece el tránsito intestinal, previniendo el estreñimiento y las molestias asociadas, como la inflamación abdominal.
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Además, la cáscara de mandarina mejora la circulación sanguínea y fortalece el sistema inmunológico gracias a su contenido de vitamina C, antioxidantes y propiedades antimicrobianas. También es útil para controlar los niveles de triglicéridos y colesterol debido a compuestos bioactivos como la naringina, un flavonoide que reduce la absorción de colesterol LDL, conocido como "colesterol malo".
Propiedades calmantes para el sueño
Aunque no hay estudios concluyentes sobre su efecto directo en la calidad del sueño, la mandarina tiene características que la hacen ideal para la noche. Su fragancia cítrica tiene un efecto relajante, ayudando a reducir el estrés y la tensión acumulados durante el día. Además, su bajo contenido calórico y fácil digestión la convierten en un excelente snack nocturno. Sin embargo, las personas propensas a la acidez deben evitar consumir cítricos antes de dormir.
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Cómo preparar el té de cáscara de mandarina
La preparación de esta infusión es sencilla y rápida. Solo necesitas:
- 2 mandarinas
- 500 ml de agua
- 2 varitas de canela
- Endulzante al gusto
Primero, lava y desinfecta bien las cáscaras de las mandarinas. Hierve el agua, añade la canela y las cáscaras, y deja cocinar durante 15 minutos. Retira del fuego, deja reposar cinco minutos y cuela la mezcla. Finalmente, endulza según tu preferencia.
Una opción relajante y nutritiva
Más allá de sus posibles efectos en el sueño, el té de cáscara de mandarina es una bebida reconfortante y saludable. Sus antioxidantes ayudan a combatir el estrés oxidativo, promoviendo la relajación antes de acostarse. Además, su sabor dulce y ligeramente especiado, gracias a la canela, es perfecto para cerrar el día.
Incorporar el té en tu rutina nocturna
Sumar esta infusión a tu rutina puede ofrecer beneficios tanto para la relajación como para la salud general. Es una manera deliciosa y natural de cuidarte antes de dormir. Aunque su efecto calmante puede variar entre personas, su perfil nutricional lo convierte en una opción valiosa para cualquier momento del día.