Todas las personas constamos de emociones que nos distinguen del resto de los seres vivos que habitan la Tierra. Estas son la manera natural en la que humanos reaccionamos a lo que ocurre a nuestro alrededor, por ello es importante no reprimirlas ni sentirnos avergonzados por ellas, remarca un informe del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
Las emociones están en la naturaleza de quienes somos como personas y son protagonistas de la investigación de diferentes disciplinas, como la Psicología, señala el Centro Clínico de Atención Psicológica Centro de Atención Psicológica Área Humana (España). Sus expertos precisa que la emoción nos saca de nuestro estado habitual, nos mueve hacia otro estado diferente.
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En este marco, desde la Clínica Galatea (Barcelona) informan que cuando las emociones se intensifican, en ocasiones podemos notar malestar y notar que las reacciones que se desencadenan están fuera de control. Es por eso que sus expertos explican que para conseguir gobernarlas, debemos aprender primero a observarlas y nombrarlas, lo que nos permitirá no estar a su merced y poder distanciarnos de ellas, de algún modo.
Al respecto, existen emociones de las que no tenemos que alejarnos ya que nos permiten acercarnos a personas que nos están necesitando. La empatía y la compasión son emociones que muchas personas consideran lo mismo, pero que tienen diferencias que merecen ser conocidas y entendidas.
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La neurocientífica alemana Tania Singer se ha encargado de marcar la diferencia entre la empatía y la compasión. La experta afirma que estas emociones son provocadas por el sufrimiento de otras personas, pero precisa que la compasión se centra en los demás, mientras que la empatía lo hace en uno mismo.
“La compasión no supone compartir el sufrimiento del otro, sino que se caracteriza por sentimientos de cordialidad, preocupación e interés por la otra persona. Supone una fuerte motivación para mejorar su bienestar”, explica Singer. De esta manera, la neurocientífica deja en claro que cuando nos invade la empatía estamos sintiendo con el otro, en vez de sentir por el otro como es el caso de la compasión.