La alimentación es uno de los puntos claves para conseguir que nuestra salud sea fuerte. Todos los nutrientes que recibimos de ellos robustecen nuestro sistema inmunitario y protegen a nuestros músculos, huesos y órganos.
En este marco, hoy queremos contarte sobre un tubérculo muy nutritivo y que ofrece propiedades que fortalecen los huesos, producen energía y ayudan a la coagulación sanguínea. La idea es que puedas conocer todas sus bondades ya que es un alimento fácil de incluir en la alimentación y que repercute positivamente en la salud en general.
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La Universidad Anáhuac Puebla señala que para mantener una salud ósea de calidad, se debe tener una dieta adecuada en lácteos y derivados ricos en calcio, además de vitamina D, evitar el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol, entre otros. Además, remarca que la acumulación de tejido graso favorece el deterioro de la salud de los huesos.
En torno a la alimentación, la chalota o echalotte es el tubérculo originario de Oriente Medio y Asia Central que destacamos en esta oportunidad debido a que colabora con nuestra salud ya que es rico en carbohidratos, hierro, alicina, flavonoides, manganeso y fenolícos, según los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.
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Estos componentes, le otorgan al echalotte propiedades que otorgan energía, ideales para quienes practican deportes; combaten la anemia, controlan los niveles de colesterol, refuerzan el sistema inmune, fortalecen a los huesos, y mejoran la circulación y coagulación de la sangre, según detallan los Institutos Nacionales de Salud.
Por lo tanto, estamos ante un producto ideal para incluir en nuestra alimentación diaria y no solo por sus beneficios, sino por su versatilidad a la hora de consumirlo. El echalotte puede consumirse cocinado o crudo, por lo que puede ser parte de ensaladas y de otras preparaciones. Su sabor es un poco más fuerte que el de la cebolla y, junto con el ajo, aparecen entre los más utilizados en el mundo de la gastronomía.
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