Todas las personas podemos ver cómo nuestra piel evidencia diversos cambios con el paso de los años y ante ciertas circunstancias.
Los especialistas recomiendan protegerla de diversas maneras para mantenerla firme, flexible y ralentizar la aparición de líneas de expresión propias del envejecimiento.
Sin embargo, existen otras situaciones que demandan especial atención, que pueden prevenirse o, si ya están presentes, tratarse. Las manchas y las estrías son algunos de estos casos que alteran la normal fisonomía de nuestra piel y es por ello que la consulta con especialistas es necesaria, aunque existen alternativas caseras para prevenirlas y hacerles frente.
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En el caso de las estrías, el Instituto Mayo Clinic las describe como rayas que aparecen en el abdomen, las mamas, la cadera, los glúteos u otras partes del cuerpo. Sus expertos afirman que son comunes en las mujeres embarazadas, en especial durante el último trimestre y, si bien no son dolorosas ni dañinas, a algunas personas no les gusta la forma en que hacen que se vea la piel.
Desde el Hospital Universitario Austral (Argentina), la dermatóloga María Agustina Fernández explica que las estrías pueden surgir en distintos momentos de la vida y por diversas causas. En general, aparecen cuando hay una combinación de crecimiento corporal rápido que puede ser en volumen o en longitud como sucede en la adolescencia junto al cambio hormonal. También es frecuente su aparición en condiciones médicas como el uso prolongado de corticoides vía oral o en forma local sobre la piel.
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Para las personas que quieren cuidar su piel ante la aparición de estrías, existen diferentes alternativas caseras que se pueden implementar. Es por eso que hoy te contaremos sobre el tratamiento natural que te ayudará a decirle adiós a estas marcas en tu piel y que es recomendado por la experta en cosmética natural Marcela Burgos.
El tratamiento cuenta de dos pasos, exfoliación y regeneración. El primero de ellos se realiza mezclando 2 cucharadas de café molido, una taza de azúcar, ¼ de taza de aceite de almendras o de coco, una cucharadita de canela en polvo y una cucharadita de extracto de vainilla. Mientras te duchas, debes utilizar esta preparación para masajear, durante unos 3 minutos, la zona a tratar. Esto eliminará las células muertas y nutrirá la piel.
El segundo paso es la aplicación de aceite antiestrías. Este se prepara con 15 gramos de aceite de rosa mosqueta, 6 gramos de aceite de avellanas, 4,5 gramos de aceite de almendras y 4,5 gramos de aceite de jojoba. Se puede añadir de forma opcional una cápsula de vitamina E.
Después de haber exfoliado la zona a tratar, debes aplicar solo algunas gotas del aceite antiestrías que preparaste y masajear hasta que se absorba completamente. De esta manera, lograrás regenerar la piel y nutrirla.