El tipo de alimentación que decidimos tener impacta directamente en el cerebro, ayudando a protegerlo del paso del tiempo, de acuerdo a un informe del Hospital Universitario Austral (Argentina). La clave está, explican sus especialistas, en llevar a cabo un estilo de vida sano.
El neurólogo José Antonio Bueri indica que un estilo de vida saludable incluye hacer ejercicio, evitar la obesidad, el tabaquismo y el exceso de alcohol. Además, destaca que, afortunadamente, cada vez se le presta más atención a la alimentación y al respecto puntualiza en dos ejes: evitar el exceso de calorías y seleccionar lo que se come.
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En cuanto a la salud del cerebro, este puede verse afectado por una trombosis que es la pérdida de oxígeno de una región de este órgano como consecuencia de la obstrucción por un trombo (coágulo) de la arteria que lo irriga, sintetiza la Clínica Universidad de La Sabana (Colombia). Por su parte, los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos especifica que, cuando los coágulos de sangre se forman en donde no deberían, el cuerpo produce demasiados coágulos o coágulos anormales; o no se descomponen como deberían y estos pueden ser peligrosos y causar otros problemas de salud.
Para evitar la formación de coágulos en el cerebro, estudios científicos han descubierto que la quinoa es el pseudocereal que no debería faltar en nuestra alimentación. Este producto es rico en proteínas, calcio, hierro y aminoácidos esenciales, superando al aporte que hacen los cereales, según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (España).
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Otros nutrientes que la quinoa aporta a la salud de nuestro cerebro son las vitaminas E y C, flavonoides (antioxidantes) y ácidos grasos Omega 3 y 6. Estos forman una combinación más que positiva ya que mejora la salud de los huesos y la piel, refuerza la salud del corazón, reduce la inflamación y evita la formación de coágulos en el cerebro.
En los últimos años, destaca un informe de la Universidad Católica de Chile, se ha ampliado su versatilidad en preparaciones, diversificando sus aplicaciones en la alimentación. Esto permite “grandes oportunidades para vegetarianos y celíacos, así como alimento funcional con enormes cualidades en la dieta a partir de los 6 meses”, explica la nutricionista Constanza Figueroa Donoso.
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