Es común que los cachorros muerdan cuando los acaricias y aunque para muchos dueños esto puede ser un comportamiento desconcertante o incluso frustrante, en realidad es algo natural en su desarrollo. El uso de la boca es una de las principales formas de comunicación de los perros. Al igual que los humanos utilizamos tonos de voz y posturas corporales para expresarnos, estos animales lo hacen mediante gestos como arrugar la nariz, mostrar o no los dientes, gruñir o mantener la boca abierta.
Sin embargo, cuando un perro muerde, es importante analizar el contexto en el que ocurre y entender los motivos detrás de esta conducta para manejarla de manera adecuada y asegurarte de que tu cachorro crezca siendo un perro equilibrado. Daniel Sebastian Ossino, Licenciado en Ciencias Naturales y Educador Canino, te explica las principales razones por las que tu mascota te muerde cuando lo acaricias:
La comunicación corporal en los perros adultos es igualmente crucial. Pueden enviarnos señales que indiquen que no están receptivos al contacto físico en ese momento. Por ejemplo, un perro que está experimentando problemas de salud, estrés, ansiedad o que ha sido expuesto a métodos de adiestramiento inadecuados, puede reaccionar negativamente cuando intentamos acariciarlo.
Un perro que ha experimentado situaciones traumáticas o falta de socialización puede morder por miedo. En estos casos, acariciarlo con la intención de calmarlo puede ser contraproducente, ya que el animal podría interpretar tu gesto como una amenaza. Por eso, es fundamental tener en cuenta que la forma en que tocamos a nuestros perros puede provocar diferentes respuestas. Acariciarlos con la mano abierta y en los costados suele tener un efecto tranquilizador, mientras que las palmaditas pueden excitarlos.
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Si tu perro continúa mostrando señales de incomodidad o agresión cuando lo acaricias, es importante buscar la ayuda de un etólogo o entrenador canino para identificar las causas subyacentes y corregir el comportamiento de manera adecuada. Con paciencia y consistencia, tu cachorro aprenderá a moderar su comportamiento y esas mordidas se convertirán en lamidos cariñosos.