La congelación es una buena forma de conservar los alimentos, pero hay que hacerlo correctamente para que no pierdan sus propiedades, de igual forma la descongelación de productos comestibles debe realizarse correctamente para evitar el crecimiento bacteriano y así prevenir enfermedades. Si quieres saber más sobre el método correcto para hacer esto no te pierdas esta nota que en El Universal hemos preparado para ti.
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Lo ideal es que la congelación sea rápida, esto se favorece con congeladores eficientes, limpios y con mucho espacio y colocando pequeños recipientes previamente enfriados en el frigorífico, sumergidos en agua con cubitos de hielo o mantenidos brevemente bajo un chorro de agua fría. La descongelación ideal es lenta y gradual, se recomienda sacar los alimentos 12 horas antes del congelador y dejarlos en el frigorífico sobre un plato o bandeja que recoja el líquido.
De acuerdo con Mariana Koppmann es bromatóloga, Bioquímica de la UBA y cocinera, docente en el Instituto Argentino de Gastronomía, aconseja tener en cuenta cuál será el uso posterior de los alimentos, y también si necesita un tratamiento previo a la congelación. De acuerdo con la especialista debemos tomar en cuenta lo siguiente:
1. Congelar en porciones pequeñas: no juntes todo, comparte, esto acelera el proceso de congelación de los alimentos.
2. Cuanto más frío esté el congelador, mejor ya que existe una diferencia significativa entre un congelador a -5 ºC y un congelador a -18 ºC. Los alimentos congelados se oxidan muy rápidamente y pueden echarse a perder, explica Koppmann.
3. Todas las verduras congeladas se pueden conservar en el congelador unos 8 meses, recuerda que al congelarse es importante poner la fecha y qué es, esto se aplica tanto crudo como cocido.
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4.Después de congelar y descongelar, las verduras no se pueden volver a congelar a menos que hayan sido cocidas.
5. El frío conserva las propiedades nutricionales de los alimentos, recuerda que estos pueden cambiar su color o apariencia, pero no su valor nutricional al ser congelados.
Recuerda que los alimentos descongelados deben prepararse y consumirse inmediatamente a una temperatura adecuada , especialmente si los métodos de descongelación incluyen inmersión en agua y microondas.
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