El mole es un platillo típico de la cocina mexicana, tiene origen en las culturas prehispánicas donde los indígenas mezclaban distintos tipos de chiles y especias. Así se convirtió en el plato principal en celebraciones patronales, bodas y funerales; mismo que ha ido modificando sus ingredientes al paso de los años.
En su Revista del Consumidor del mes de octubre, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) compartió el análisis de 33 marcas de moles industrializados para informar a los mexicanos qué ingredientes contienen los moles de venta comercial, y que puedan elegir el de mejor calidad.
En el análisis se detalla que, dependiendo de su formulación y del tamaño de la porción, el aporte nutrimental puede variar, pero principalmente contiene: grasa, carbohidratos y azúcares.
Algunos de los ingredientes de los moles industrializados, como las grasas y los azúcares, pueden ser dañinos para la salud si se consumen en cantidades considerables.
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Pero, ¿que contiene el mole industrializado?
Los ingredientes del mole, ya sea en pasta o polvo, pueden ser diferentes según la preparación de la marca. No todos los moles contienen lo mismo y tampoco son envasados de la misma forma.
Ingredientes Básicos: chiles, agua, aceites y/o grasas comestibles, harinas, féculas o almidones y sal.
Ingredientes Opcionales: semillas de chile, chocolate, cacao, cacahuate, pasas, almendras, avellanas, nueces, pan blanco, tortillas o tostadas, jitomate y plátano macho.
Potenciadores de sabor: caldo de pollo, que puede contener Glutamato monosódico; extractos de levadura; y extractos de soya.
Colorantes: caramelo clase IV, rojo allura, indigotina, tartrazina.
Especias y Condimentos: ajo, cebolla, nuez moscada, pimienta, clavo, cominos, anís, semillas de ajonjolí, semillas de cilantro, canela y hierbas de olor.
Azúcares
Antioxidantes: Para evitar la rancidez del aceite o grasa.
Conservadores: Para evitar el crecimiento de hongos, principalmente. Pueden ser: benzoato de sodio y sorbato de potasio.
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Ingredientes del mole industrializado que podrían dañar la salud
El daño en el organismo por ingesta de azúcares, grasas y carbohidratos depende de la cantidad que una persona consuma en un periodo determinado o si padece alguna enfermedad o condición que requiere control médico.
De acuerdo con un comunicado publicado por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ingerir azúcar en grandes cantidades puede causar altos niveles de glucemias, que deriva en daños al riñón, corazón y ojos.
También anunció que los altos niveles de azúcar en la sangre pueden ser la causa de la hipertrigliceridemia, que se refiere a la alteración de las grasas o lípidos del organismo.
En la revista de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se comparte que “las enfermedades cardiovasculares, principales detonantes de mortalidad en todo el mundo, se vinculan estrechamente con un consumo elevado de grasas saturadas e hidrogenadas”.
Detallan que el consumo de grasas saturadas “representa uno de los factores de riesgo más relevantes. Otros elementos que potencian la probabilidad de padecer estas enfermedades son la falta de ejercicio, el consumo de tabaco y el abuso de alcohol”.
Las grasas saturadas e hidrogenadas están presentes en diversos productos de consumo diario, como: la mantequilla, la leche, la carne, el salmón, los huevos y algunos productos derivados de plantas, como el chocolate o el aceite de palma.
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