“Mafalda” es uno de los personajes de historieta más famosos del mundo. Nació en la Argentina en 1964 y fue publicada hasta 1973 por decisión de su creador, el humorista gráfico Joaquín Salvador Lavado, más conocido como Quino. Su popularidad creció a pasos agigantados y hasta el día de hoy se la recuerda con mucho cariño.
Países como España, Italia, Francia y Grecia recibieron con los brazos abiertos a “Mafalda”. Sus ideas se transmitieron también por toda Latinoamérica y fueron traducidas a más de veinte idiomas. Quino se transformó así en un embajador de las ideas y un erudito del pensamiento de los años sesenta.
El hábito de la Tía Paca
Quino le dio vida a este personaje y con él pudo darle libertad a sus pensamientos sobe el cuidado del medio ambiente, la paz mundial, el futuro de la humanidad y el poder de los medios de comunicación. Con “Mafalda” canalizó sus críticas a la sociedad de aquellos tiempos, algo que logró empatizar con lo que ocurría en otros puntos del mundo.
“Mafalda” no estaba sola en la tira, sino que su creador la había rodeado de una gran cantidad de personajes con los que la niña interactuaba y así podía encender la chispa de humor y sarcasmos. Entre los personajes que Quino creó había unos principales y otros secundarios, y entre estos últimos se encontraba la “Tía Paca”.
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La “Tía Paca” era tía directa de “Raquel”, la madre de “Mafalda” y su primera aparición en la historieta de Quino fue en 1967. Esta mujer frecuentaba a menudo a la niña protagonista pero tenía un hábito que no le agradaba a “Mafalda” y es que cuando la veía la saludaba con demasiados besos, por lo que se transformaba en algunas de las quejas que la pequeña expresaba al interactuar con este personaje.