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Las enfermedades cardíacas son un riesgo enorme para la salud. Estas están asociadas al colesterol alto y a la presión sanguínea elevada.
Parte de ello se puede dar por el consumo peligroso de alimentos procesados, ultraprocesados y cargados de grasas saturadas; y sumado a esto se les suele diagnosticar a personas que han sido sedentarias durante toda su vida.
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Hay que decir que el colesterol es una sustancia cerosa necesaria en cantidades moderadas para que el cuerpo pueda producir hormonas, células y vitamina D. Es nuestro organismo quien se encarga de producir la cantidad que se necesita para las funciones antes mencionadas; sin embargo, cuando un paciente abusa de la grasa que ingiere a diario, los niveles de dicha sustancia aumentan alojándose en las paredes de las arterias e impidiendo la libre circulación de la sangre y el oxígeno hacia otras partes del cuerpo, algo que puede llegar a detonar en un infarto o ataque cerebrovascular.
Tres consejos para reducir los niveles de colesterol en la sangre
De acuerdo con la Universidad de Ciencias de la Salud de Arizona, estos son algunos de los hábitos que resultan indispensables para reducir los niveles de colesterol elevados en la sangre:
- Controlar el peso: mantener un peso saludable es fundamental para reducir el exceso de colesterol en la sangre. Para ello se recomienda contar con la asesoría de un profesional como lo es un nutricionista este diseñara el plan de alimentación adecuado para cada paciente con el fin de reducir esos kilos de más sin que se ponga en riesgo la salud.
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- Realizar ejercicio: al practicar deporte de manera frecuente esto aumenta de manera directa el colesterol HDL (bueno) y reduces el colesterol LDL (malo). Lo ideal es hacer ejercicios todos los días de manera intensa o moderada, ya que hace más que quemar calorías; también activa los genes que son de beneficio para la salud de otras maneras. Además, el ejercicio es uno de los mejores tratamientos para la depresión y la ansiedad.
- Hacer dieta saludable: resulta importante tomar conciencia de que hay que alimentarse de manera sana y equilibrada con el fin de prevenir un sinfín de enfermedades o de tener mejores condiciones de salud, en dado caso de que toque enfrentarlas. Dentro de esa dieta hay que incluir el consumo de carne magra (es decir, baja en grasa como el pollo, el pescado o el pavo) y debes dejar de fumar y dejar de lado el consumo de alcohol.