“La Degolladora” infundió un miedo colectivo nunca antes visto entre los habitantes de Chimalhuacán, en el Estado de México. La forma en cómo atacaba, acuchillándolos en el cuello mientras caminaban, atemorizó a todos los vecinos en el Barrio Curtidores.
Los ataques ocurrieron del 13 al 18 de septiembre de 2015, en donde se contabilizaron al menos 7 agresiones resultando fatales 2 de ellas.
Nadie se imaginaba, que una joven de 20 años, de nombre Itzel Nayeli, quien vendía dulces en el paradero de Chimalhuacán, tímida y callada, era la asesina con la suficiente fuerza para someter a un hombre y ensartarle un cuchillo.
“Sería una asesina desorganizada, sedentaria y hedonista, destaca el hecho de que sus ataques fueron cometidos cuerpo a cuerpo, un modus operandi poco común en las asesinas seriales mujeres”, escribió Ricardo Ham, en su libro “Asesinos seriales mexicanos” sobre Itzel Nayeli.
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Itzel Nayeli Montaño nació en 1995 en el seno de una familia pobre. Su padre lavaba coches y fue la segunda de seis hijos. Vivía en una casa con 12 personas, entre sus papás, hermanos, y otros parientes.
Solo estudió hasta tercer grado de primaria y era común se drogara con solventes, puesto que la desinhibía y la volvía agresiva.
Cuando cumplió 14 años conoció a un hombre mayor con el que se mudó a vivir con él. Un par de años después se embarazó, sin embargo, por complicaciones perdió al bebé y quedó estéril. Después se separó del sujeto y sus vicios por el alcohol y los solventes se incrementaron.
El 13 de septiembre de 2015, la degolladora de Chimalhuacán cometió su primer ataque. Las características propias de la asesina hacían que sus víctimas no se sintieran amenazados cuando se les acercaba.
A las 05:30 horas de ese día, un hombre de 43 años de edad fue atacado por Itzel, quien le enterró un cuchillo en el cuello.
La lesión de 15 centímetros de profundidad lo lastimó, pero no dañó ningún órgano vital y el sujeto sobrevivió.
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Sin embargo, dos días después, Itzel Nayeli mataría a dos mujeres.
El 15 de septiembre, fue hallada en un camión una mujer degollada, identificada como Rosario Laureano Ventura, de 40 años de edad, ninguno de los pasajeros se dio cuenta del ataque.
Otra víctima, Brenda Chantal Mondragón Martínez de 16 años de edad, fue asesinada cuando caminaba a su escuela. La joven recibió una puñalada en la yugular que terminó por desangrarla.
Después, a estos ataques se sumarían cuatro más, en donde las víctimas vivirían para contarlo, pero con cicatrices de un arma blanca en sus cuellos.
El 2 de octubre de 2015, después de 20 días de investigación fue detenida en las inmediaciones de su domicilio en Chimalhuacán, Itzel Nayeli Montaño, después de ser denunciada por su pareja y un segundo hombre con quien también trabajaba en el comercio informal.
Ambos hombres denunciaron que Itzel Montaño trató de asesinarlos cortándoles el cuello.
Ella admitió estas dos agresiones y aceptó haberlas cometido bajo el influjo del alcohol y de solventes. Ambas agresiones se habrían producido el 13 de septiembre de 2015.
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En un principio la policía negó que la joven estuviera relacionada con los crímenes de “la Degolladora”, pero para el 9 de octubre de 2015, rectificó y la señaló como la presunta responsable de los asesinatos en serie.
Para julio de 2017, Itzel Montaño fue condenada a 20 años de prisión por un cargo de intento de asesinato, aún está a la espera de ser juzgado por otros de los cargos.
Con información de Emilio Fernández y Yara Silva