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La alimentación de las personas puede variar mucho a lo largo de los años. Mientras más avanzados en edad estamos más nos preocupa nuestra salud y comenzamos a realizar ajustes en el tipo de alimentos que consumimos. La clave siempre está en priorizar aquellos que más nutrientes le pueden aportar a nuestro organismo.
En los últimos años, y con una gran influencia de la pandemia de coronavirus, más personas han buscado mejorar su alimentación y estilo de vida, volcándose a hábitos saludables. El objetivo es tener una salud fortalecida y aspirar a tener una vejez con el mayor bienestar general posible.
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Miel y yogurt para la salud
El plan de alimentación que implementemos en nuestra vida debe poner el foco en la inclusión de vitaminas, minerales, fibra y proteínas que favorezcan las funciones de nuestro cuerpo y su mantenimiento. En este marco, proteger la salud intestinal está relacionado con un menor riesgo de enfermedades infecciosas y enfermedades crónicas no transmisibles como obesidad, diabetes, síndrome metabólico e hipertensión arterial, entre otras, según un informe de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile.
Desde los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos remarcan que la salud del intestino tiene un papel fundamental en la salud y bienestar general de las personas por lo que podemos tomar decisiones para ayudar a que el cuerpo vaya por el buen camino. La alimentación es uno de los caminos para lograr ese objetivo y es por eso que hoy destacamos la combinación de yogurt con miel.
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Agregarle miel al yogurt tiene un gran impacto en nuestra salud ya que este producto natural ayuda a proteger las bacterias beneficiosas de las enzimas que habitan el intestino. Este descubrimiento fue realizado por científicos de la Universidad de Illinois (Estados Unidos) que señalaron que esta combinación de alimentos evidenció una mayor supervivencia de estas bacterias frente a los fluidos intestinales.
“Hemos descubierto que una cucharada de miel en una ración de yogur ayuda a mantener la supervivencia de los probióticos”, remarcó la profesora Hannah Holscher, coautora de la investigación.
En cuanto a los alimentos señalados, primero se debe destacar que el yogurt es rico en vitaminas del grupo A y B, y de minerales como el calcio, fósforo, magnesio y zinc, según la Fundación Española del Corazón. La miel, señalan desde la Universidad de O'Higgins (Chile), ofrece propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antimicrobianas, por lo que combinarlos resulta muy beneficioso para la salud en general.
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