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El embarazo en perras es un tema de gran interés y responsabilidad para los dueños de mascotas. Comprender este proceso es esencial para garantizar la salud y el bienestar tanto de la madre como de los cachorros. María Besteiros, Auxiliar técnico veterinario y peluquera canina y felina, manifiesta que este proceso fascinante y complejo, dura aproximadamente dos meses o unos 63 días.
Durante este periodo, el cuerpo de las perras atraviesa numerosos cambios, de los cuales muchos ocurren internamente y son imperceptibles al ojo humano, aunque algunos se vuelven visibles hacia el final de la gestación. Uno de los cambios más evidentes es el aumento del tamaño de las mamas.
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¿Cuándo crecen las mamas de una perra embarazada?
Cuando sospechamos que una perra podría estar embarazada, especialmente si fue rescatada o montada sin saber la fecha exacta de fecundación, buscamos indicios de su estado. Las preguntas clave son si la perra está gestando y de cuánto tiempo. Sin la ayuda de un veterinario, no siempre es fácil ni preciso determinarlo, ya que el periodo de gestación varía. Los signos de embarazo pueden aparecer en diferentes momentos y el parto puede ocurrir entre los días 56 y 66.
El crecimiento de las mamas suele ser visible alrededor del día 40, aunque varía según cada perra. Además del agrandamiento, los pezones también cambian, oscureciéndose y aumentando de tamaño conforme se acerca el parto. En algunas perras, las mamas pueden empezar a secretar una sustancia lechosa, preparando el cuerpo para la futura lactancia.
¿Puedo saber si mi perra está embarazada por las mamas?
Aunque el agrandamiento de las mamas es un signo de embarazo, no es exclusivo de este estado. Una perra que acaba de parir o una que atraviesa una falsa gestación también puede tener mamas agrandadas. Por lo tanto, no debemos basarnos únicamente en este signo para confirmar o descartar una gestación. Además, existen otros signos de embarazo cómo:
- Aumento de peso: Inicialmente ligero.
- Náuseas matutinas: Pueden aparecer hacia la tercera o cuarta semana, debido a cambios hormonales y uterinos. Provoca náuseas, apatía, pérdida del apetito y vómitos ocasionales, que duran solo unos días.
- Abdomen más grande: Se nota aproximadamente hacia el día 40 y sigue creciendo hasta el parto.
- Secreción lechosa: Aproximándose el momento del parto.
- Movimientos de los cachorros: Visibles o palpables en las últimas dos semanas de gestación.
Para estar completamente seguros de si una perra está gestando, lo mejor es acudir al veterinario. Aproximadamente entre los días 26 y 35, un veterinario experimentado puede detectar la gestación mediante la palpación del abdomen. Sin embargo, no se recomienda intentar esta palpación en casa, ya que se pueden confundir diferentes estructuras abdominales con fetos y causar daño. La ecografía es una forma segura y efectiva de confirmar el embarazo y puede detectar la gestación desde el día 18.
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De esta manera, el embarazo en perras es un proceso lleno de cambios y señales que requieren atención y cuidado. Conocer estos signos y acudir al veterinario para confirmaciones y cuidados adecuados es esencial para asegurar la salud de la madre y sus cachorros. Mantente informado y ofrece a tu perra el mejor cuidado posible durante esta etapa tan importante de su vida.
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