El magnesio es un mineral esencial que cumple funciones vitales en el cuerpo humano, pero lo que muchos no saben es que existen diferentes tipos de magnesio, cada uno con usos específicos. Por eso te presentamos ocho de estos tipos y para qué sirven, según los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por su sigla en inglés).
Es una de las formas más populares debido a su alta absorción. Se utiliza comúnmente para tratar el estreñimiento, ya que tiene un suave efecto laxante. Además, es eficaz para aumentar los niveles de magnesio en el cuerpo, contribuyendo a la salud general.
Es la forma más económica de magnesio, aunque tiene baja biodisponibilidad, lo que significa que se absorbe en menor cantidad. Suele emplearse para tratar deficiencias de magnesio y también es útil como antiácido para aliviar el reflujo gástrico.
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Este tipo de magnesio es altamente biodisponible y versátil. Es ideal para tratar afecciones como la artritis y calambres musculares, además de fortalecer el sistema inmunológico. También contribuye a la salud ósea y ayuda en la recuperación muscular.
El lactato de magnesio es suave y bien tolerado por el organismo, siendo una buena opción para personas con problemas digestivos. Es fácil de absorber y es ideal para corregir deficiencias sin causar irritación en el estómago.
Es conocido por su capacidad para aumentar los niveles de energía. Al estar involucrado en la producción de ATP, la molécula que almacena y transfiere energía en las células, es beneficioso para personas que sufren de fatiga o dolor muscular crónico.
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Este tipo de magnesio es especialmente beneficioso para el cerebro. Puede atravesar la barrera hematoencefálica, mejorando la función cognitiva, la memoria y el aprendizaje. Se recomienda para personas que buscan prevenir el deterioro cognitivo.
También conocido como sal de Epsom, este tipo se usa principalmente de forma externa. Se disuelve en baños para relajar los músculos y aliviar el estrés. También tiene propiedades laxantes y diuréticas si se consume oralmente, aunque su uso más común es para aliviar dolores musculares.
Este tipo de magnesio está combinado con el aminoácido glicina, lo que mejora su absorción. Es ideal para reducir la fatiga muscular, el estrés mental y los calambres, y es conocido por mejorar la calidad del sueño.