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El ponche de frutas es sin duda la bebida emblemática de la Navidad en México por excelencia. Su sabor y aroma dulzón lo han convertido en el consentido de las cenas decembrinas, pero hay una alternativa que también ha ido ganando terreno en los paladares más gourmet.
Se trata del vino caliente, una preparación especiada muy buscada en Europa en los meses de noviembre y diciembre. Éste se prepara con vino tinto, especias y naranja.
Más allá de su sabor concentrado, el vino caliente también conocido como “vin chaud”, en fránces, o “Glühwein”, en alemán, aporta beneficios a la salud por sus ingredientes.
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Esta bebida se puede encontrar en los mercados navideños, y como el ponche de frutas, se ha convertido en un clásico de las cenas de Navidad y Año Nuevo.
Pero en tu mesa puede ser una alternativa al ponche con “piquete”.
¿Qué beneficios aporta el vino caliente al organismo?
Para tener en cuenta los beneficios de sus ingredientes, vale la pena repasar la receta. Éste se hace con vino tinto (no es necesario que sea muy sofisticado), azúcar moreno, cardamomo, clavo, canela en rajas, anís estrella y naranja.
La mezcla deba calentarse, pero evitar hervir. Así se concentrarán los sabores, lo suficiente para que no se amarguen.
Ahora sí, es momento de conocer los beneficios del vino caliente, comenzando por el vino tinto. De acuerdo con Mayo Clinic, éste es saludable para el corazón cuando se consume con moderación.
Ayuda a prevenir la enfermedad de las arterias coronarias, afección que provoca ataques cardíacos. Además, enuncia que los antioxidantes de esta bebida, llamados polifenoles pueden ayudar a proteger el revestimiento de los vasos sanguíneos del corazón.
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Mientras que especias como el cardamomo tienen propiedades antisépticas, además de aliviar molestias digestivas, como el anís estrella y, como publicó Menú de EL UNIVERSAL ser un antidiabético.
Mientras que la naranja es fuente de vitamina C por excelencia, fibra y potasio. Que además ayuda a normalizar los niveles altos de colesterol en la sangre.
Mientras que el clavo de olor, de acuerdo con el portal del Poder del Consumidor, es fuente de vitaminas A, C, D, K, y minerales. Tiene propiedades antiinflamatorios y antibióticas, además de cualidades anticoagulantes.
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