Diversos países están volteando a ver a las grandes compañías de tecnología . Amazon, Apple, Facebook y Google han tenido que presentarse ante reguladores para explicar cómo es que han logrado tal nivel de poder y cómo es que no hay un competidor fuerte que equilibre el mercado. Los CEO de dichas empresas siempre han argumentado que simplemente han escuchado a sus usuarios y que ello les ha permitido ser los primeros en su sector. Pero eso no siempre convence a las autoridades y la Comisión Europea ha abierto una investigación antimonopolio en contra de Google.
Las autoridades están evaluando una supuesta violación a la ley de competencia por parte de Google debido a sus políticas de tecnología publicitaria. Los reguladores, que llevan alrededor de dos años investigando a la compañía, ahora evaluarán si Google está favoreciendo sus propios servicios al restringir el acceso de los rivales a los datos de los usuarios con fines publicitarios.
Como parte de la investigación, según informó el medio Engadget, la Comisión analizará la publicidad gráfica y en video de Google en YouTube, la plataforma de administración de anuncios de Google y el mercado de inventario Ad Manager y AdX, junto con las restricciones de datos de usuario que impone a terceros, incluidos los rivales de anuncios en línea, editores y anunciantes en general. Los reguladores también examinarán la decisión de Google de finalizar el seguimiento de usuarios individuales en Chrome y Android como parte de sus cambios de privacidad .
“Los servicios de publicidad en línea son la base de como Google y los editores monetizan sus servicios en línea. Nos preocupa que Google haya dificultado que los servicios de publicidad rivales compitan en la denominada pila de tecnología publicitaria", dijo Margrethe Vestager, jefa antimonopolio de la Unión Europea.
Como señala la Comisión, no existe un plazo legal para concluir un caso antimonopolio. En última instancia, eso significa que una investigación que se ha estado gestando informalmente durante dos años podría tardar el mismo tiempo en llegar a una decisión final. Si se descubre que Google ha violado las reglas antimonopolio, se le impondrá multas .
Por su parte, Google dijo que cooperaría con la Comisión Europea para ilustrar las ventajas de sus productos publicitarios para las empresas y el público. "Miles de empresas europeas utilizan nuestros productos publicitarios para llegar a nuevos clientes y financiar sus sitios web todos los días. Los eligen porque son competitivos y eficaces. Seguiremos colaborando de forma constructiva con la Comisión para responder a sus preguntas y demostrar los beneficios de nuestros productos a las empresas y los consumidores europeos", dijo un portavoz de Google en un comunicado.
Hay que recordar que Google ya ha sido multada por la Unión Europea por considerar que ha llevado a cabo prácticas publicitarias abusivas. En tres ocasiones, entre 2015 y 2018, los reguladores han acusado a la compañía. Además, el gigante web también está siendo investigado en el Reino Unido .
Otras empresas en la mira
Google no es la única compañía que está siendo investigada en Europa. En 2020 Amazon enfrentó cargos antimonopolio por la manera en que usaba datos sobre los vendedores en su plataforma pues, afirmaron los reguladores, por un lado, sirve como plataforma para los comerciantes pero, por otro, también es rival de esos vendedores.
La investigación de la Comisión descubrió que grandes cantidades de datos sobre vendedores externos estaban disponibles para los empleados de Amazon y fluían hacia los sistemas automatizados de la empresa. Advirtieron que el acceso a esos datos le dieron a la compañía una ventaja injusta por lo que la declaró culpable de abusar de su posición dominante como la mayor plataforma en línea de Francia y Alemania, los dos mercados más grandes de Europa.
Por su parte, Apple ha sido cuestionada por sus prácticas en la App Store, tanto en Europa como en Estados Unidos, pues ha recibido denuncias de empresas como Epic Games , los creadores de Fortnite, de que no fomenta una competencia justa pues cobra un 30% de comisión sobre la compra inicial de una app y sobre las ventas que se hagan en la misma.
La compañía todavía espera una sentencia pero argumenta que la razón por la cual defiende sus prácticas es que protege la privacidad de los usuarios al no permitir la instalación de apps ajenas a su tienda.