Para nadie es una sorpresa que el presidente de Estados Unidos hable de medidas que suenan a una locura y que en su discurso, sobre todo con las elecciones cada vez más cerca, los inmigrantes sean considerados casi enemigos del país. Precisamente en ese sentido está proponiendo recopilar los datos biométricos de esta comunidad como una medida para mantener la seguridad .
De acuerdo con varios medios de nuestro país vecino del norte, la administración Trump planea expandir drásticamente la recopilación de datos biométricos de inmigrantes. Lo cual, por supuesto ha generado temores entre esta comunidad que en los últimos años se ha visto marginada y que, con esta medida podría ser puesta bajo vigilancia profunda y permanente.
Las propuestas autorizaría el uso de datos biométricos "más allá de la verificación de antecedentes, para contribuir a la verificación de identidad, la producción segura de documentos y la gestión de registros", dijo el martes el Departamento de Seguridad Nacional.
Cabe señalar que los servicios de inmigración de Estados Unidos ya recopilan información biométrica como huellas dactilares , además de fotografías y firmas de personas mayores de 14 años que solicitan ciertos beneficios de inmigración. Sin embargo, lo que se está proponiendo bajo las nuevas reglas es que también tengan que entregar datos a través de escaneos de iris, impresiones de voz, impresiones de la palma de la mano y fotografías que serán utilizadas para alimentar sistemas de reconocimiento facial.
Por si fuera poco, si esta propuesta se acepta, las autoridades también tendrán el permiso de recolectar muestra de ADN para "verificar las afirmaciones de relaciones genéticas" entre adultos y menores bajo la custodia del departamento.
De acuerdo con un borrador de la política visto por el medio BuzzFeed News, el gobierno estaría autorizado a obtener estos datos en cualquier momento antes de que una persona obtenga la ciudadanía, independientemente de su edad, con la intención de asegurarse de que esté bajo una "investigación" continua.
Incluso la medida de vigilancia iría un paso más allá y las autoridades de inmigración también podrían solicitar estos datos a los ciudadanos estadounidenses que son contactos o “patrocinadores” de los migrantes.
Advertencias sobre las consecuencias
Aunque por ahora se trata solo de una propuesta, diversas voces se han expresado en contra de la medida explicando cuáles podrían ser las consecuencias de su aprobación.
“Esto crearía una base de datos biométrica permanente sobre solicitantes de inmigración, incluidos los niños y los patrocinadores ciudadanos estadounidenses. Existe un enorme potencial de daño sin prácticamente ningún beneficio", advirtió la abogada de privacidad Calli Shroeder en un tweet.
Por su parte, Andrea Flores, subdirectora de política de inmigración de la Unión Estadounidense de Libertades Civiles , dijo que las propuestas cambiarían radicalmente el sistema de inmigración de Estados Unidos: “Recopilar una base de datos masiva de planos genéticos no nos hará más seguros, simplemente facilitará que el gobierno vigile y se dirija a nuestras comunidades y nos acerque a una pesadilla distópica. El objetivo de Trump es claro: cerrar el sistema de inmigración legal y hacer que la inmigración sea lo más difícil posible. ¿Se lo va a permitir el Congreso?”.
Asimismo especialistas han hecho notar que esta propuesta podría ser solo el inicio de una prueba para que, en unos años, la vigilancia a través de elementos biométricos sea una realidad, no solo para la comunidad de inmigrantes sino para otros grupos ya vulnerables y, después, para toda la sociedad.
Cabe decir que varios gobiernos del mundo, por ejemplo el de China, están apostando por tecnologías como el reconocimiento facial afirmando que pueden ayudar a garantizar la seguridad nacional. Por supuesto las preocupaciones respecto a la privacidad van en aumento.