A pesar de que la venta de computadoras en todo el mundo tuvo un crecimiento debido a la pandemia de Covid-19 y a la necesidad de hacer home office , Toshiba tomó la decisión de salir del negocio de las computadoras portátiles, poniendo fin a una trayectoria de 35 años.
La compañía anunció que iba a transferir su participación minoritaria en el negocio de PC a Sharp a la que, dos años atrás, es decir en 2018, había vendió un porcentaje de 80.1 de su sector de PC por 36 millones de dólares. Entonces Sharp cambió el nombre de la división a Dynabook . Y ahora se informó ejerció su derecho a comprar el 19.9% restante de las acciones en junio. Toshiba emitió un comunicado el 4 de agosto de que el acuerdo se completó.
“Como resultado de esta transferencia, Dynabook se ha convertido en una subsidiaria de propiedad total de Sharp”, dijo Toshiba en un comunicado aunque ya no dieron a conocer los detalles del monto que esta transacción significó para ambas marcas.
La historia de Toshiba en el mundo de las computadoras es muy relevante. La empresa fabricó la primera computadora portátil en 1985, se trató de la T1100 que contaba con baterías internas recargables, una unidad de disquete de 3.5 pulgadas, 256K de memoria, un peso de 4 kilos y una pantalla LCD que solo llegaba a 640 x 200 pixeles.
De acuerdo con ComputerWorld, cuando realizó una retrospectiva en el aniversario 20 de ese modelo, en un inicio los ejecutivos de Toshiba no estaban seguros acerca del éxito de la computadora portátil, pero finalmente apostaron por ella y comenzaron a vender la T1100 por alrededor de 2 mil dólares, inicialmente solo en Europa y con un objetivo de ventas anual de 10 mil unidades.
El éxito fue tal que este modelo de la compañía marcó algunas de las líneas a seguir durante los próximos años en cuanto a portátiles se refiere, por ejemplo, la compatibilidad con IBM PC lo cual ayudó a la adopción masiva de estos equipos.
Durante la década de 1990 y principios de la del 2000, Toshiba se encontraba entre los principales fabricantes de PC. Sin embargo, a medida que más jugadores decidían participar en este mercado y que los usuarios comenzaron a adoptar nuevos dispositivos como los teléfonos inteligentes , tuvieron menos ventajas para ofrecer a los consumidores y sus modelos comenzaron a perder popularidad.
De acuerdo con Reuters, para cuando vendió el porcentaje a Sharp, la participación de Toshiba en el mercado de PC había disminuido desde su pico de 2011 de 17.7 millones de PC vendidas a alrededor de 1.4 millones en 2017.
En 2016 Toshiba tomó la decisión de dejar de fabricar computadoras portátiles de consumo para el mercado europeo, centrándose solo en hardware para empresas. Aunque decidió mantener su producción y venta para países como México. Sin embargo, ahora toda su división ha pasado a manos de Sharp.
Cabe señalar que, como informan medios como The Verge, los últimos años han sido difíciles para el conglomerado: en 2015, la empresa registró una pérdida anual de 318 millones de dólares. Y, ese mismo año, su presidente y vicepresidente se vieron obligados a renunciar luego de que un panel independiente descubrió que la empresa había exagerado sus ganancias durante los seis años anteriores.
Además, en 2019, cerró su negocio nuclear NuGen, en el Reino Unido, después de no encontrar un comprador para él.
Aun así vale la pena señalar que Toshiba mantendrá su participación en otros negocios y que sigue siendo un nombre importante en industrias como la de impresión, el almacenamiento y la energía.