Una tendencia que ha ido creciendo en popularidad en los últimos meses es la compra de NFT , siglas del término token no fungible en inglés, que es algo así como comprar el certificado de autenticidad de un archivo digital único. Aunque se ha utilizado más para obras de arte virtual , también se está probando en otros casos, como el primer tweet de la historia que, publicado por Jack Dorsey , logró un valor de 2.9 millones de dólares.
El cofundador y director ejecutivo de Twitter, Jack Dorsey, vendió el día de ayer una versión autenticada de su primer tuit en una nueva demostración del furor desatado por los NFT, artículos virtuales por los que los coleccionistas se están peleando.
Lo que se subastó fue la imagen del mensaje "Configurando mi cuenta Twttr" ("Just setting up my twttr"), que Dorsey publicó en marzo de 2006 en una época en que Twitter solo era una herramienta de comunicación interna entre empleados de la empresa de podcasts Odeo.
El tweet estaba a la venta en la plataforma Valuables desde el pasado 5 de marzo y fue adquirido por el empresario Sina Estavi, de Malasia, quien, como muchos actores en el mercado emergente de los NFT, se mueve en el mundo de las blockchain y las criptomonedas desde hace varios años. Actualmente es director gerente de la plataforma de blockchain Bridge Oracle y parece tener planes de ampliar su colección, pues ofreció 1.1 millones de dólares por un tuit de Elon Musk aunque al final dijo que retiraría su tuit de la venta.
Respecto al mensaje de Dorsey, la casa de subastas Valuables explicó que solo el autor del tuit puede venderlo como un NFT. La empresa, que no tiene relación con Twitter, se quedó con el 5% de las ganancias de la venta y el resto se le dio al vendedor, en este caso Dorsey quien se comprometió a convertir los fondos recaudados en bitcoin y donarlos a la ONG Give Directly, que combate la pobreza extrema en el África subsahariana.
Sin embargo hay que destacar que, tras la venta, el mensaje permanece visible para todos en línea salvo que Jack Dorsey o Twitter decidan lo contrario. Y es que "poseer" un tweet no cambia su estado en Twitter. Más bien, el postor ganador está comprando "un certificado digital del tweet, único porque ha sido firmado y verificado por el creador".
La venta fue posible gracias a la aparición de un nuevo formato digital, el NFT que permite asociar cualquier objeto virtual, como una imagen, una foto, una animación, un video o una pieza musical, con un certificado de autenticidad que lo convierte en una pieza única.
Este certificado es teóricamente inviolable y no se puede duplicar. Se creó utilizando la tecnología blockchain, la misma que usan las criptomonedas como el bitcoin.
En los últimos meses este modelo ha llamado mucho la atención pues, por ejemplo, el pasado 11 de marzo, la casa de subastas Christie's vendió la primera obra de arte íntegramente digital , un archivo JPG con sistema NFT que corresponde a la obra "Everydays: The First 5000 Days", un collage de creaciones digitales diarias del artista Beeple desde sus comienzos, por un récord de casi 70 millones de dólares a pesar de que todos con una conexión a internet puede obtener una copia. Es parecido a lo que sucede con el arte físico, solo una persona puede tener la obra original que, por ejemplo, pintó Frida Kahlo, pero millones de personas pueden tener cuadros y hasta llevar esa misma imagen en su mochila.
La mala noticia es que, aunque sea digital, lo que podría suponer que no está en peligro de daños por el ambiente, conforme pasa el tiempo, la calidad de la imagen se deteriora, pues sigue aumentando la resolución; los formatos de archivo dejan de ser compatibles y ya no se pueden abrir; los sitios web se caen; y las personas olvidan la contraseña de sus billeteras, así que no es una inversión segura.