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Cada día, millones de personas en ciudades como la CDMX tienen que desplazarse , en auto o transporte público, hasta sus centros de trabajo . Considerando que estamos hablando de alrededor de 20 millones de personas que van y vienen en la zona metropolitana de la capital, el tráfico y la alta afluencia en el metro y los autobuses son molestias constantes para los habitantes.
Una solución para mejorar la calidad de vida de los trabajadores y, de paso, ayudar al cuidado del medio ambiente, es el home office o teletrabajo que el Senado de la República está impulsando, pero ¿ México está listo para adoptar este modelo laboral?
Por parte de los empleados, la posibilidad de trabajar algunos días del mes desde su hogar, u otro sitio diferente a la oficina, es recibida con agrado pues, de acuerdo con una encuesta realizada por Citrix denominada “El trabajador digital : ¿qué busca y cómo trabaja?”, el 48% de los mexicanos se cambiaría de empleo si le brindaran la posibilidad de laborar de manera remota.
Por parte de las empresas, la idea no parece tan seductora. “La realidad es que en México la flexibilidad laboral todavía tiene grandes áreas de oportunidad. Vemos que hay cierta resistencia al cambio organizacional. Un estudio que llevamos a cabo en Latinoamérica arrojó que solo 40% de las empresas brindan opciones de trabajo flexible.
El 19% permite el home office y, el 14% posibilita a los empleados trabajar desde cualquier lugar y en cualquier momento... Las compañías deben empezar a comprender que el trabajo de los colaboradores se mide en función de lo que producen, entregan y resuelven, no según las horas que pasan en una oficina”, comentó Martín Borjas, Country Manager de Citrix México.
Al respecto, la plataforma digital de freelancers Workana señaló que el modelo de home office no ha sido funcional debido a que la cultura corporativa, la colaboración, los canales de comunicación, seguimiento y monitoreo de tiempos de entrega resultan complejos. Además de que los trabajadores suelen mezclar las tareas del hogar con las laborales, lo cual no aumenta la productividad.
Por lo anterior es que las empresas no siempre están dispuestas a impulsar el trabajo flexible , como señala Silvina Moschini, presidente y cofundadora de la firma TransparentBusiness: “el reto será romper con los paradigmas actuales para que el trabajo sea sinónimo de algo que se hace y no un lugar al que se va. Para lograrlo será crucial adoptar nuevas tecnologías que brinden transparencia de manera que las compañías puedan implementar el teletrabajo de un modo confiable y efectivo”.
La ejecutiva agregó que la transparencia, la definición clara de objetivos y el tiempo límite de entrega son las claves para lograr la coordinación de las tareas en equipo y el cumplimiento de cada miembro de la empresa.
“Con un esquema de trabajo transparente, ya no cuenta el monitoreo de la persona física en la oficina sino el proceso de trabajo”, dijo Moschini.
Hasta ahora, según datos de Workana , son las MiPyMEs las que mayor cantidad de trabajadores remotos incorporan a sus equipos aunque, en los últimos años, han notado un creciente interés por parte de las grandes empresas.
Y es que, aunque podría haber algo de resistencia, el cambio es inminente, tal como comentó Moschini: “hoy estamos inmersos en un contexto que demanda más soluciones de teletrabajo en México como consecuencia, entre otros factores, de las grandes distancias desde y hacia la oficina, dado que en la Ciudad de México la mayoría de los viajes duran entre media hora y dos horas”.
Otra de las razones por las que se espera que el modelo de trabajo remoto tenga un impulso importante en los próximos años es la llegada de las nuevas generaciones al campo laboral, entre ellos los millennials que, para 2025, representarán el 75% de la fuerza laboral; además de los centennials o generación Z, personas nacidas a partir de 1996. Ambos grupos se muestran atraídos por sistemas de trabajo totalmente influidos por la tecnología y por compensaciones más allá de la remuneración monetaria.
El reto, entonces, explicó Martín Borjas, de Citrix , es que las organizaciones se comprometan a brindar tecnología que se adapte a las necesidades de productividad de los trabajadores y les brinde una buena experiencia de uso.
El problema es que actualmente “los empleados pasan más del 25% de su tiempo laboral buscando la información que necesitan para trabajar. Además, un empleado promedio pasa por cuatro o más aplicaciones para realizar un solo proceso de negocios. Y, para acceder, deben gestionar diversas contraseñas e interfaces. Todo esto quita tiempo y concentración”, advirtió Borjas.
Las organizaciones, entonces, tienen que integrar aplicaciones, servicios y dispositivos en nubes y centros de datos de manera que puedan mantener el control de su información, pero también permitan a los usuarios ingresar con una sola clave a todo lo que necesitan.
En ese sentido, Jan Ryniewicz, director de Marketing para Latinoamérica en Veeam , explicó que la solución está en un modelo de nube con el que la seguridad y disponibilidad de la información y aplicaciones estén garantizadas a través de respaldos automáticos completos, ágiles, inteligentes y eficientes.
“Ya hay soluciones para resolver estos desafíos y, con ellas, el teletrabajo será una realidad en menos tiempo que el imaginado”, señaló Moschini.
Retos y beneficios
Más allá de reducir el estrés de los empleados, trabajar desde casa permitiría a varios sectores de la sociedad, con ciertas limitantes, entrar sin restricciones al campo laboral. Por ejemplo, personas que viven en lugares geográficamente lejanos, madres que eligen dedicar más tiempo a la crianza, personas con discapacidad, entre otras.
“Hoy México tiene la oportunidad de generar un verdadero cambio de paradigma hacia un empleo inclusivo, y que miles de profesionales ubicados en distintos puntos del país desarrollen sus carreras y exporten su talento al mundo pues, a la hora de contratar personal, ya no será importante la ubicación de los candidatos, comentó Silvina Moschini.
Bajo esta idea, las empresas pueden formar equipos de trabajo con múltiples cualidades y características culturales, lo que enriquece los procesos. Incluso es una opción viable para que las organizaciones logren presencia internacional o en otras regiones, sin necesidad de contar con instalaciones físicas.
Otro de los beneficios del modelo de trabajo remoto es el cuidado al medio ambiente, como expone Greenpeace México : “trabajar desde casa reduce el uso de automóviles o transporte público. Por lo tanto, el tránsito vehicular y, con ello, las emisiones de carbono. Si esta práctica se combina con un estilo de vida sustentable y equilibrado habrá mejoras sustanciales para nuestra salud, para el medio ambiente y para el campo laboral. Además, nuestras finanzas personales van a mejorar y la administración de nuestro tiempo para realizar otras actividades tendrá más posibilidades”.
Por otra parte, las organizaciones que aplican este modelo pueden registrar ahorros en costos de infraestructura y recursos como electricidad y espacio.
Pese a la posibilidad de tener un mejor balance entre la vida profesional y laboral, y reducir sus gastos personales, los trabajadores deberán enfrentar el reto de ser productivos y concentrarse para cumplir cabalmente con sus objetivos.
Por parte de las empresas, el desafío será establecer buenas prácticas y adoptar tecnología que garanticen que sus empleados a distancia cuenten con todos los recursos necesarios para llevar a cabo su trabajo de modo eficiente.
Al respecto , Moschini señaló: “las empresas en general están muy dispuestas a implementar programas de home office siempre y cuando tengan herramientas tecnológicas que les permitan tener el control y coordinar las tareas de los equipos para garantizar los resultados”.
Más allá del miedo de perder el control o la productividad de los empleados, otra preocupación que tienen las organizaciones es la seguridad de su información que, al no estar almacenada en solo un sitio, podría ser robada.
En ese sentido Martín Borjas, de Citrix México , comentó que existen sistemas que permiten al departamento de sistemas controlar quién accede a qué y ver toda la actividad de los usuarios para, en caso de detectar alguna anomalía, borrar la información en un dispositivo, revocar sus permisos o simplemente enviar una notificación al usuario para corregir el problema de inmediato.
Si vas a trabajar desde casa...
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Tu cama o el sofá frente a la televisión pueden ser muy seductores y, aunque en ciertas ocasiones podrían servirte para olvidar el estrés, lo mejor es designar un cuarto independiente ventilado e iluminado que debes mantener ordenado y limpio para que te mantengas concentrado.
Establece un decálogo de reglas. Incluye cosas como “iniciar mi día desayunando” o aspectos más elaborados como “realizar reportes mensuales de resultados”.
Planifica tu día; ponte horarios y límites. Si lo haces correctamente, encontrarás tiempo para actividades que normalmente no hacías, como hacer ejercicio.
Asegúrate de establecer límites claros y dedicar a cada cosa su justo tiempo. Resistirte a las distracciones y al entretenimiento que puede dar tu hogar es esencial para cumplir objetivos. Pon atención a tu vestimenta. No importa si no verás a nadie en el día, vístete para triunfar. Esto contribuye a un estado anímico que beneficia la productividad.
Fuente: René Salazar, gerente senior de Desarrollo de Negocios en PayPal México
Modificarán Ley Federal
El pasado 20 de junio, por unanimidad, el Senado de la República aprobó modificar el artículo 311 de la Ley Federal del Trabajo para incorporar un nuevo capítulo que regule las diferentes modalidades de teletrabajo, incluido el home office, con la intención de llevar beneficios tanto a las empresas como a los trabajadores.
El primer punto a destacar es que no es lo mismo el trabajo independiente o freelance, al trabajo remoto, pues este último se realiza desde la casa del empleado o “en un local libremente elegido por él, sin vigilancia ni dirección inmediata” de un jefe.
En ese sentido, en el capítulo XII BIS, se establece que en el contrato laboral la empresa se compromete a brindar las condiciones de servicio, medios tecnológicos y de ambiente para ejecutar el empleo de manera remota.
Los patrones, además, deben proporcionar a los teletrabajadores igualdad de trato, remuneración, capacitación, formación, seguridad social, acceso a las mejores oportunidades laborales, de la misma manera que lo harían con alguien que trabaja en la oficina.
La reforma destaca que este modelo debe estar sustentado en la utilización de tecnologías de la información y las telecomunicaciones, con miras a que los trabajadores puedan conciliar su vida personal y laboral.
La propuesta fue turnada a la Cámara de Diputados para su revisión y discusión ante el pleno de la Cámara baja. De aprobarse, sería publicada en el Diario Oficial de la Federación y el Ejecutivo Federal tendrá un año para crear una Norma Oficial Mexicana que reglamente la figura de home office. Además se conformará una red nacional de fomento al teletrabajo que brinde asesoría y promueva este modelo, en el ámbito privado y público, brindando, por ejemplo, incentivos fiscales.